La sequía se ha convertido en un grave problema que amenaza los cultivos y cosechas de este año. Debido a la gravedad del asunto, el Ministerio de Agricultura ha convocado de manera urgente una mesa de sequía para evaluar el daño en el campo de la actual falta de precipitaciones.
La reunión estará presidida por el subsecretario del ministerio, Ernesto Abati, y asistirán representanes de los ministerios de Agricultura y Transición Ecológica y Reto Demográfico y de las comunidades autónomas.
Agricultura convoca una mesa urgente
La convocatoria llega días después de las peticiones del sector para tomar medidas coordinadas entre las administraciones que sirvan para paliar la “grave” situación del campo español.
Las producciones agrarias que más se están viendo afectadas por la sequía son el secano, cereales y buena parte de leguminosas, patata, hortalizas y hasta el viñedo. Además, esta situación de merma de la producción ha llevado a las organizaciones a agrarias a alertar de que los precios pueden incrementarse para el consumidor final.
Menos oferta y misma demanda
El portavoz de la Ejecutiva de a Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), Andrés Góngora, señala que la subida de precios es la única alternativa que maneja el sector primario, y en concreto el hortofrutícola, para hacer frente a las coyunturas por las que atraviesan los productores.
Se prevé que habrá menos oferta y misma demanda. De cara a la reunión que convoca Agricultura, los productores desean que además de analizar la situación y la evolución de embalses y producciones, se aprueben ayudas y un plan de choque.
Efectos de la falta de lluvia en los precios
Los agricultores alertan sobre los efectos que puede tener a corto y largo plazo la falta de lluvias. El más alarmante es que si se mantiene la primavera seca, puede no haber cultivos para verano. Un ejemplo afectado es la fruta de hueso y los cítricos.
En momentos puntuales del verano pasado, el precio del melón y la sandía en los lineales de los supermercados llegó a alcanzar los 12 y 13 euros, debido a la finalización de la temporada marroquí, el retraso de unas semanas de la cosecha por las lluvias y las bajas temperaturas de primavera. Aunque los agricultores se mantienen cautos sobre si podrían repetirse estas cifras, todo apunta a un incremento de precios para este verano.