La popular marca de chocolates Toblerone se verá obligada por ley a transformar su imagen: tendrá que dejar de usar el monte Cervino como logotipo de sus envases, tras tomar la decisión de trasladar su producción a Eslovaquia.
La firma centenaria creada en 1908 por el chocolatero suizo Theodor Tobler se ha visto afectada por normativas que impiden mostrar en productos comerciales determinados iconos como la bandera nacional o el Cervino (también conocido como Matterhorn) si no están fabricados en el país.
“Establecido en Suiza”
La multinacional estadounidense Mondelez, dueña de Toblerone desde 2012, adelantó este cambio al diario local Aargauer Zeitung, y también indicó que el lema "fabricado en Suiza", que acompañaba a los envases, se sustituirá por la frase "establecido en Suiza", también por imperativo legal.
Las leyes suizas establecen que para que un producto pueda presentarse como hecho en el país (algo que suele asociarse a precios más caros) debe tener un 80 % de sus materias primas provenientes del territorio, un porcentaje que aumenta al 100 % en el caso de la leche y sus derivados.
Símbolo turístico
Con su característica forma triangular (también muy semejante al Cervino), este chocolate con almendra y miel tiene una presencia obligada en todas las tiendas turísticas de Suiza, incluidas las cercanas al icónico monte alpino, uno de los lugares más visitados del país, con una altura de 4.478 metros.
El traslado de la producción de Toblerone a Eslovaquia, concretamente a una planta de la capital Bratislava, fue anunciado en junio del año pasado, después de más de un siglo de fabricación en Berna. Lo que no cambiará es el nombre, Toblerone, que combina el apellido del fundador de la marca con la palabra italiana torrone, un dulce de miel y almendras con un origen léxico similar al turrón español.