La Peste Porcina Africana (PPA) amenaza al sector de la carne. El presidente de la Asociación Nacional de Comerciantes de Ganado Porcino (Ancoporc), Josep Llinas, pide responsabilidad a los operadores que comercializan con cerdos vivos intracomunitarios para que extremen las precauciones para evitar la llegada de la al país, tras el último foco aparecido en Alemania, situado a 15 kilómetros de la frontera con Países Bajos, país este último que es el "mayor suministrador de lechones".
"Hay que ser conscientes del peligro que conlleva en estos momentos el movimiento de animales intracomunitarios y debe ser nuestra obligación ser conocedores de lo que hay en juego", indica en un comunicado. Asimismo, Llinas pide que, "sin cesar la actividad, se incremente la seguridad de los movimientos intracomunitarios de la especie porcina con destino" a España.
Un brote sería un golpe económico tremendo
Más en concreto, ha recomendado "restringir y, si es posible, evitar" las cargas de lechones de multi-origen en los centros de concentración para la exportación; los originados en los centros de parada, por distancia obligada, durante el trayecto; y el comercio de lechones con destino sacrificio.
Según Llinas, un brote de PPA en España "sería un golpe económico tremendo que acabaría con gran parte del sector por el cierre de las exportaciones a ciertos destinos clave".
No importar animales vivos
Con este llamamiento, Ancoporc se suma al que hizo la semana pasada la organización agraria COAG pidiendo a las empresas del sector porcino que no importen animales vivos durante el periodo "necesario" hasta conocer las causas del último brote de Peste Porcina Africana (PPA) en Alemania.
En un comunicado, la organización reclamó igualmente a las empresas importadoras "responsabilidad" a para evitar la entrada de la PPA a España.