Al pasar por un supermercado en busca de una comida rápida aparecen múltiples opciones. Aunque es cierto que en muchos casos, rápido y barato suele significar procesado y poco sano. Las ensaladas envasadas de la marca navarra Florette llegaron en 2015 siguiendo su tradición de aproximar las verduras frescas a todas las familias españolas, pero con un añadido: ahora podías comer una ensalada rápida y fresca por apenas tres euros.
Desde este momento, la variedad de la oferta ha aumentado con nuevas recetas o ingredientes para que cada consumidor encuentre su favorita. Esta estrategia confirió a la marca un crecimiento del 30 % de sus beneficios entre 2016 y 2019. Sin embargo, el éxito de estas ensaladas preparadas ha hecho que mucha gente no se plantee el precio real que esconde en su interior, pese a que sería más sencillo y barato usar cinco minutos para mezclar los componentes de estas recetas en la comodidad del hogar.
Platos preparados
Seguro que más de una persona se ha quedado con hambre después de una de estas ensaladas. Algo más que normal cuando un paquete apenas alcanza los 200 gramos. “Una ensalada completa debería contar con 200 gramos de verduras, unos 40 o 50 gramos de hidratos como el arroz y entre 80 y 120 gramos de proteínas. Si no, además de no ser una comida completa en el plano nutricional, también puede dejar con hambre, lo que no ayuda si lo que se busca es hacer una dieta saludable”, comenta Ana Colomer, nutricionista y dietista en una clínica de Valencia.
Estos porcentajes no se respetan en este tipo de productos a pesar de que suelen definirse como ensaladas completas. Además la experta indica que la calidad de los ingredientes no suele ser alta, lo que no ayuda a convertirlo en un alimento fácil de recomendar. Esa es una de las explicaciones de la enorme carga calórica que tienen algunas ensaladas de esta firma, cuyos alimentos acostumbran a contener una gran cantidad de conservantes y aditivos.
El precio de una ensalada
¿Cuánto cuesta realmente una ensalada de Florette? Para este cálculo, Consumidor Global ha seleccionado cada ingrediente de tres ensaladas Florette y ha calculado el precio de venta de cada uno de ellos en la marca Carrrefour. En el caso de la ensalada completa gourmet, el queso de cabra supone el 10% del contenido de sus 180 gramos. Por tanto, esos 18 gramos cuestan, aproximadamente, 0,21 euros en la marca blanca de Carrefour. Los brotes, una tercera parte del peso total de la ensalada, tienen con un valor de 0,32 euros. Los 15 gramos de nueces cuestan 0,19 euros. Su contenido de manzana valen unos 5 céntimos. Los 10 gramos de pasas y 11 de palitos de pan se consiguen por 7 y 8 céntimos respectivamente. La salsa de vinagreta de la propia Florette asciende a cerca de los 40 céntimos. Lo mismo se puede aplicar en el caso de la ensalada césar, seleccionando como ejemplo la salsa homónima de Carrefour.
Así, la ensalada completa gourmet con nueces y queso de cabra de Florette (180 gramos) se vende por 2,99 euros, mientras que sus componentes --en las cantidades necesarias para hacer un plato idéntico-- se pueden conseguir por solo 1,42 euros. Es decir, menos de la mitad del precio de la ensalada. Y algo similar ocurre con la ensalada completa mixta con atún y aceitunas (se puede replicar por 0,88 euros) y la ensalada completa César American style con pollo, bacon y queso cheddar (1,13 euros).
Salsas poco saludables
Las salas en este tipo de preparaciones suelen representar en torno al 25 % del peso total del alimento envasado como es el caso de la salsa césar de la ensalada. Además de distar con las recetas originales de dichos aliños, uno de los componentes más abundantes es el azúcar, ya sea como dextrosa, sacarosa o miel. Junto a ellos, un sin fin de aromatizantes, estabilizantes y demás aditivos que, sumado a la falta de alimentos reales o las proporciones ínfimas de los mismos, alejan demasiado a estos aderezos de unos reales.
En cuanto a su valor nutricional, cabe señalar que no es su mejor baza como plato saludable. “Estas ensaladas pueden ser una opción rápida para aquellos que no pueden comer de tupper, pero en consulta siempre digo que si se compran no se consuman con la salsa, que las aderece uno mismo. La gente piensa que es un producto saludable y que comen sano, pero realmente no saben lo que están comiendo”, concluye Colomer.