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Las cremas de Belén Esteban a examen: ¿qué opinan los expertos?

La princesa del pueblo lanza tres purés frescos; uno de calabacín, otro de calabaza y un tercero de verduras ¿son una opción saludable?

Núria Messeguer

Belén Esteban en la presentación de las cremas de Sabores de la Esteban / EP

Que se preparen, porque el imperio de Sabores de la Esteban acaba de empezar. Con la irrupción del gazpacho y salmorejo, la vecina de Paracuellos prometió más y, después de seis meses, llegan a los supermercados españoles sus nuevos productos: tres cremas de verduras y unas patatas fritas. 

La Estaban no arriesga como Carlos Ríos, quien en su primera incursión en el sector de la alimentación, se decantó por el mutabal y el hummus, dos tipos de untables orientales. La colaboradora de Telecinco ha preferido innovar en platos nacionales, al más puro estilo cocina de la abuela. De hecho, las cremas de verduras no contienen ningún aditivo, conservante, colorante, ni tampoco lactosa o gluten. “Son 100 % naturales”, ha recalcado la Esteban durante la presentación de sus cremas ayer en Madrid. Pero, ¿pasarán las cremas de verduras el filtro de los nutricionistas?

Pros y contras

La Esteban ha sacado tres cremas distintas: de calabacín, de calabaza y de verduras. Todas ellas contienen de entre seis y once ingredientes, y no sobrepasan las 50 kilocalorías cada 100 gramos. “En ingredientes está muy bien, no hay ningún componente raro, son todo verduras, aceite de oliva virgen extra y especias”, señala Carlos Palomo, nutricionista en la consulta Vita Sane de Sevilla.

“Como contras, cabe apuntar que contienen poca fibra y una cantidad de sal algo elevada, pero es lo normal en este tipo de alimentos. De hecho, en el caso de la sal, tienen menos que sus competidores del mercado”, corrobora este experto. Así, de las tres cremas, la de calabacín es la que menos sal contiene --0,66 gramos cada 100 gramos--. No obstante, este mismo sabor posee almidón de maíz, un tipo de azúcar oculto según Palomo, Pero reitera que “no lleva mucho dulce, sólo 3,3 gramos cada 100 gramos”. Con todo, este especialista considera que “no se puede poner ninguna pega, son productos muy buenos”. El formato de las cremas es el único inconveniente que tienen estos productos de Sabores de la Esteban, ya que al ser tan naturales y frescos “tienen una fecha de caducidad relativamente corta en comparación con los productos esterilizados que van en brick”.

Así son las cremas de verduras de Belén Esteban / CG

¿Cómo saben? 

Las tres cremas tienen sus particularidades, todas saben distinto, todas llevan el sello del vegetal que las protagoniza. Probablemente, la que más sorprenda sea la de calabacín. No es una crema de calabacín cualquiera, la de Sabores de la Esteban tiene más presencia que la tradicional. Esto se debe en parte a la presencia de coliflor que le otorga a la crema un regusto final muy suculento. No obstante, a quienes no les agrade la coliflor, les va a costar más apreciar la particularidad de esta crema. 

La crema de verduras y la de calabaza tienen más consistencia que la anterior. La de verduras es la más dulce de todas, en el paladar se aprecian de forma notoria la calabaza y la zanahoria que acompañan a la crema junto al calabacín y también el brócoli. En cambio, la de calabaza es más cítrica, las especias ganan un especial protagonismo en esta crema, no es tan suave como las otras que hay en el mercado, al contrario, es una calabaza con acento. 

Así son las cremas de verduras de Belén Esteban / CG

La competencia

Las cremas de la Esteban competirán en los lineales de los supermercados con varias ofertas muy consolidadas. Los purés de la marca Knorr son los más destacados. Pero, a diferencia de las cremas de la Esteban, estas están pasteurizadas y, por lo general, contienen una mayor cantidad de conservantes. Por ejemplo la de zanahoria y calabaza de esta marca, sólo lleva un 14 % de zanahoria y un 1,7 % de calabaza, y todo lo demás son añadidos como aromas, azúcares o mantequilla.

Mercadona y Carrefour también venden cremas similares a las de Sabores de la Esteban, pero a diferencia de las de Paracuellos, las de estos supermercados no poseen tanta cantidad de vegetal como las de Sabores de la Esteban. Además,  éstas pueden llevar trazas de cereales, leche, soja y huevo, por lo que su consumo no es apto para personas con alergias y veganas.

Calidad sin importar el precio

Las cremas de Belén Esteban salen al mercado con precios competitivos, pero no son las más baratas. El envase de 350 gramos se ofrece a 1,99 euros (es decir, 57 céntimos por 100 gramos). Las de Knorr, por su parte, ascienden a 1,87 euros por medio litro, es decir, aproximadamente 37 céntimos por 100 gramos, pero es un producto pasteurizado. 

Las cremas de Carrefour se comercializan a 1,60 euros el bote de 488 mililitros (alrededor de 33 céntimos cada 100 gramos. Y Mercadona vende sus cremas de verduras a 1,60 euros el bote de 350 gramos (46 céntimos cada 100 gramos). 

Cuatro productos más, en breve

“Quiero que no me vean como la Belén televisiva, que yo tengo unos productos de alimentación y aunque la gente me diga ‘qué rabia te tengo’, yo les digo: pruébalos”, ha apuntado la Esteban durante la presentación de sus cremas de verduras. Ya son seis productos los que ha lanzado la presentadora de Telecinco y, si las verduras y las patatas fritas --que en los próximos días serán analizadas por Consumidor Global-- cosechan tanto éxito como el gazpacho y salmorejo, la familia deSabores de la Esteban crecerá.

“Quedan mínimo cuatro más”, explican en exclusiva a Consumidor Global fuentes cercanas a la princesa del pueblo ¿Cuáles? De momento, es toda una incógnita pero, como se ha comprobado con estos últimos lanzamientos, parece que a la Esteban le atraen los platos gastronómicos más tradicionales. La aventura empresarial de la vecina de Paracuellos no ha hecho más que empezar y, aunque le quede mucho en la tele, parece que también le ha pillado el gusto a su faceta como mujer de negocios. “Yo no soy imagen, soy la empresa”, afirmaba con rotundidad ayer en la presentación. No obstante, habrá que esperar a ver cuál será su próximo lanzamiento, ¿tal vez un turrón?