Estas son las 10 comidas que más engordan (y las que menos)

La alimentación influye en la salud y el peso de una persona, y una dieta equilibrada y saludable es clave para mantener un buen estado de forma y prevenir enfermedades. Lo ideal es apostar por alimentos ricos en vitaminas, minerales y proteínas, y también conviene saber cuáles son los que más engordan. No obstante, un alto contenido calórico no significa que una comida sea mala per se, sino que debe consumirse en momentos concretos.

Las calorías son, en realidad, una medida energética, y aportan la energía necesaria para el funcionamiento del organismo, pero en exceso pueden conducir al aumento de peso. También influyen mucho los hábitos, como el sedentarismo o el tabaquismo, que empeoran la salud de una persona.

Patatas fritas

Un estudio de la revista científica PloS One revela que las patatas fritas están dentro de los alimentos más adictivos que hay, lo que significa que es difícil comer solo unas pocas.

Su contenido de grasa y de carbohidratos refinados es elevado, así que consumirlas en exceso puede generar aumento de peso. Por otra parte, son un complemento habitual en muchos restaurantes, desde establecimientos tradicionales a McDonald’s.

Embutidos

En segundo lugar, hay que tener cuidado con las carnes procesadas. Existe la creencia de que comer demasiada carne de vaca o de cerdo puede derivar en un aumento de peso, pero las realmente perjudiciales son las carnes procesadas, como los embutidos: jamón, salchichas o tocino.

Este tipo de alimentos suelen contener bastante grasa y calorías, además de aditivos como conservantes, sodio y otros ingredientes poco saludables.

Comida a domicilio, de hamburguesas a pizzas

Un estudio del Journal of Clinical & Diagnostic Research expone que hay una asociación entre las comidas a domicilio más pedidas y el aumento del índice de masa corporal. Por eso, lo más recomendable es limitar el consumo de hamburguesas y otros clásicos del delivery.

Por ejemplo, comer muchas pizzas regularmente puede estar asociado con un mayor riesgo de desarrollar obesidad, ya que contienen un alto contenido calórico: son ricas en carbohidratos, grasas saturadas y sodio.

Snacks y bolsas

Los snacks que se sacan en las máquinas de vending, como el típico mix de frutos secos fritos o las patatas tipo Pringles, suelen tener una gran cantidad de calorías y de sal. Por ello, son enemigos de las dietas saludables.

Además, puede incluir glutamato monosódico. Por eso, sucede lo mismo que con las patatas fritas: tienen un componente adictivo.

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Refrescos azucarados

La Coca-Cola, por supuesto, pero también el Aquarius o la Fanta. Consumir todos los días un vaso o dos de refresco puede hacer que una persona suba de peso y que sus niveles de glucosa en sangre se disparen.

Asimismo, una investigación de la publicación Current Developments of Nutrition sugiere que puede existir una relación entre su consumo y el aumento del riesgo de diabetes.

Bollería industrial

El quinto puesto es para la bollería industrial, mucho más nociva que los postres y dulces caseros. Miles de productos contienen grasas trans, sustancias que pueden afectar la salud al aumentar el colesterol malo y disminuir el bueno.

Entre los más habituales figuran galletas, bollos o croissants. Su consumo debe ser esporádico y moderado, porque, si no, se incrementa el riesgo de sufrir enfermedades cardíacas.

Margarina y mantequilla

Las margarinas también contienen una gran cantidad de grasas trans. Sucede lo mismo con la mantequilla, aunque no existe suficiente evidencia para determinar si tiene los mismos efectos negativos en la salud.

Sin embargo, también es recomendable reducir su ingesta.

Fritos, de churros a rosquillas

Todos los platillos que se fríen en aceite o grasa aumentan su valor calórico. De hecho, el consumo frecuente de alimentos fritos está asociado con el aumento del riesgo de sobrepeso.

Por eso, lo mejor es reducir el consumo de rosquillas o churros. Una solución para que sean más saludables es apostar por una freidora de aire.

Arroz blanco

Aunque no lo parezca, el arroz es otro de los alimentos que engordan más consumidos en el mundo, sobre todo porque se suele combinar de carnes, salsas y más tipos de comida.

Tiene un alto contenido de carbohidratos refinados y su índice glucémico también es elevado. Algunos nutricionistas recomiendan el integral, ya que se digiere más lento y genera un mayor tiempo de saciedad.

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Zumos de fruta preparados

Incluso aquellos zumos que en su etiqueta dicen ser 100 % naturales suelen incluir poca cantidad de fibras y muchos azúcares, según un estudio de Pediatric Obesity.

Según reflejó este análisis, los niños que consumían zumos de frutas del supermercado de forma regular presentaban un mayor aumento del índice de masa corporal.

Los alimentos que menos engordan

Por el contrario, entre los alimentos que menos engordan destacan los pescados blancos o azules (como la dorada, la merluza o el bacalao). Son muy buenos por su aporte de omega-3 y fósforo.

También sobresalen los cereales integrales (como la quinoa), las carnes magras (como el pavo o el pollo, que cuentan con muchas proteínas), los mariscos, los crustáceos, las legumbres (ricas en fibras y proteínas) y, por supuesto, las frutas y verduras.