Durante el embarazo hay muchos alimentos que están prohibidos y que no se recomiendan, así como, también, determinados medicamentos. Por eso, antes realizar cualquier tratamiento o tomar un fármaco siempre es mejor preguntar al médico qué está permitido y qué no.
Incluso hay que tener cuidado con el paracetamol, aunque se puede tomar durante el embarazo. De hecho, un estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) publicado en el European Journal of Epidemiology ha analizado cómo han afectado a casi 74.000 niños y niñas la exposición prenatal y posnatal al paracetamol.
Hiperactividad y autismo
Los expertos han detectado que existe una relación entre los síntomas de trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH) y los del espectro autista (TEA) y el paracetamol que tomaron las madres durante el embarazo.
En concreto, los menores que habían estado expuestos a esta medicación antes de nacer han mostrado una mayor probabilidad a la hora de desarrollar estos trastornos. “Los datos son consistentes con lo que indicaban trabajos previos. La exposición prenatal al paracetamol afecta de forma similar a niños y niñas”, ha subrayado Silvia Alemany, investigadora de ISGlobal.
Recomendaciones
La recomendación de los expertos, sin embargo, no es prohibir el uso del paracetamol en embarazadas “Si se tienen en cuenta todas las evidencias sobre el uso del paracetamol y el desarrollo neurológico estamos de acuerdo con las recomendaciones que indican que no debe suprimirse en mujeres embarazadas ni en la infancia, pero debe limitarse sólo a cuando sea necesario”, matiza Jordi Sunyer, otro autor del estudio.
Por ello, lejos de crear una alarma en la población, los investigadores lo que subrayan es que el consumo de paracetamol debe limitarse a las situaciones en las que esté indicado y no abusar de este fármaco por el simple hecho de que se vende sin receta médica.