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Vivolt: "Robamos a las comercializadoras para que nuestros clientes ahorren en la factura de la luz"
Entrevistamos al fundador de la asesoría y gestoría energética, Lucas Treviño, para descubrir los trucos que permiten rebajar los extractos de las eléctricas a fin de mes
Cambiar de compañía eléctrica o revisar los detalles del contrato para ahorrar unos euros en la factura de la luz es un trámite de lo más tedioso para la mayoría de los españoles. Para remediar esta pereza congénita, ahora que los precios de la luz y el gas están disparados, nace Vivolt, una asesoría y gestoría energética gratuita.
“La media de ahorro en la factura de la luz de nuestros clientes particulares es de un 20 %, pero, en casos puntuales, ha llegado a ser de un 80 %”, expone a Consumidor Global el fundador de Vivolt, Lucas Treviño, al que entrevistamos para saber cómo consiguen que los consumidores paguen menos por la energía.
--Vivolt se hace llamar ‘el Robin Hood del sector energético’, ¿a quiénes roban para darlo a los consumidores?
--En este caso, a las comercializadoras. Hay quienes piensan que las comercializadoras tienen un precio que aplican a sus clientes y que este precio es homogéneo en función de cuando contrates la tarifa, pero la realidad es que no es así. Hay todo tipo de tarifas y, en función del comercial que te toque, te puede endosar una u otra para tener más margen de beneficio. Ellos venden un producto e intentan hacerlo lo más caro posible.
--También suelen utilizar políticas de captación agresivas a modo de anzuelo y luego…
--Es cierto, a menudo entran con políticas de captación muy agresivas y el segundo año te suben el precio. Nosotros hacemos de escudo para el cliente y nos aseguramos de que no le cobran estas subidas y otros extras innecesarios. Vigilamos que las comercializadoras no saquen tajada. En el último año, con la subida de costes de la energía, muchas comercializadoras incluso han incrementado sus márgenes.
--¿Cuánto ahorran los clientes de Vivolt en su factura de la luz?
--La media de ahorro de nuestros clientes en residencial es de un 20 %. En pymes, del 16 %. Luego hay casos que son una barbaridad: a un residencial le llegamos a ahorrar un 80 %.
--Un consumidor paga 70 euros de electricidad al mes, ¿qué le pueden garantizar?
--La garantía que ofrecemos es que haremos un análisis objetivo, transparente y gratuito, y, si se puede mejorar el contrato, lo haremos. No podemos garantizar un ahorro sin conocer qué condiciones tienes. Cada contrato está sujeto al momento en que se hizo, a la comercializadora, al comercial, a la permanencia… Si te diéramos un porcentaje de ahorro, te estaríamos mintiendo.
--¿Cuáles son los tres grandes errores que cometen los españoles en sus casas con la electricidad?
--Todavía hay mucha gente que tiene bombillas halógenas en casa, cuando las LED tienen un consumo siete veces menor y su instalación es sencilla. Otro error muy habitual consiste en no mirar el rendimiento energético de los electrodomésticos. Cuando vamos a comprar una nevera o un aire acondicionado, miramos el precio final y nos olvidamos del rendimiento energético que ofrece. Más allá del tema medioambiental, a nivel económico, la mayor o menor eficiencia tiene un impacto notable en la factura. En tercer lugar, tener una potencia contratada excesiva o inferior a la necesaria también marca la diferencia a fin de mes.
--¿Cómo puede saber el consumidor si la potencia contratada que requiere su hogar es la adecuada?
--Con las tarifas domésticas (2.0), la prueba es que te salten los plomos. Si el consumo en un momento puntual excede la potencia que tienes contratada, los plomos saltan y tal vez tengas que subirla. Si no saltan nunca, suele ser un mal indicador y es probable que tengas contratada una potencia mayor de la que necesitas y estés pagando un extra innecesario cada mes. Hacer la prueba de encenderlo casi todo de golpe, forzar que salten los plomos y así ajustar la potencia suele funcionar.
--Dígame tres trucos para ahorrar energía…
--Es muy importante el tema de los aislamientos. A veces nos centramos en calentar un espacio y en la energía que ello requiere, y se nos olvida que mantener luego esa temperatura es igual de importante. Tener unos buenos aislamientos en puertas y ventanas, conservar ese ambiente que tanto nos ha costado crear, es básico. También es clave ajustar bien la temperatura --en la climatización y en la nevera--, porque cada grado extra conlleva un 7 % más de consumo, y evitar los volantazos. Por último, revisar la factura de manera más frecuente, porque los precios suelen variar de un año a otro y hacer un seguimiento ayuda, especialmente en la renovación. A fecha final de contrato, te suben los precios y lo pueden hacer sin nuestro consentimiento. Hay que revisarlo.
--¿Mejor calefacción a gas o eléctrica?
--A día de hoy, nos decantamos por la eléctrica. Sobre todo, pensando en el futuro. En cuanto a eficiencia energética, es mejor la de gas. A nivel económico, hasta hace poco también era mejor la de gas, pero, desde que se inició la guerra de Ucrania se ha disparado todo. Además, la tendencia eléctrica a medio largo plazo es que el precio vaya bajando poco a poco. Cada vez hay más energías renovables, mientras que el gas es un recurso limitado y no bajará mucho. En España somos dependientes del gas de Rusia y Argelia, y en temas eléctricos no sólo tenemos mucha producción, sino que en tu propia casa puedes generar electricidad si pones placas.
--¿En qué consiste el tope al gas que viene en las facturas?
--Cuando entró en vigor, era una burrada el precio y creó mucho revuelo, ¿por qué me cobran gas en la factura si yo no tengo gas? Es un mecanismo financiero que se ha implementado para bajar el coste eléctrico general. En España, una cuarta parte de la electricidad se genera con gas. Con la guerra de Ucrania, el precio del gas se dispara, estos generadores multiplican costes y empezamos a pagar más por la factura eléctrica. Por un lado, este mecanismo limita el precio al que estos generadores pueden vender la electricidad y reduce el precio general del mercado. Pero este déficit al que se ha obligado a las empresas de generación de gas se debe pagar después en la factura para que no tengan pérdidas.
--Entonces, ¿qué ventaja ofrece a los consumidores?
--En España, el precio de todo el mercado lo marca la generadora más cara. Si a las gasistas se les dispara el precio, todo el precio de la energía se dispara. Para que no paguemos toda la energía a ese precio, se ha optado por pagar una compensación a las gasistas y contener así el precio general de la energía.
--¿Sigue siendo más rentable la tarifa regulada que acudir al mercado libre?
--A nivel doméstico, podemos optar por la tarifa regulada, pero en tarifas 3.0 (para pymes) o superiores es un disparate. ¿Cuál es más rentable? Depende mucho del momento. La regulada fluctúa con el mercado, mientras que el mercado libre ofrece opciones de precio fijo. Ahora mismo, con el gas, es más rentable la regulada, porque el Gobierno ha limitado el precio. También ha sido más económica en el último año. Con respecto a la luz, ha habido gente que ha estado en el mercado libre con precios fijos más bajos que la regulada y gente que ha pagado de más. La preferencia por una u otra depende de la estabilidad que busques: el mercado libre permite, en cuanto a costes, hacer previsiones. También hay mucha gente que desconoce la existencia de estos dos mercados y de los beneficios de cada uno.
--¿Qué tarifa recomendarías a nivel doméstico?
--A día de hoy, en lo referente al gas, recomendaría la tarifa regulada. A nivel luz, se espera una bajada de mercado y también puede ser un buen momento para estar o contratar la regulada. En verano-otoño, si los precios son más bajos, puede haber ofertas fijas interesantes en el mercado libre. Mirando a largo plazo, la regulada sale mejor.
--¿La asesoría y gestoría energética gratuita que ofrecéis es una rara avis en España?
--Sí, lo es. Hay muchas gestorías energéticas gratuitas donde no ofrecen el mejor precio para el consumidor y buscan una relación a corto plazo. También están las que ofrecen un asesoramiento de pago, que puede ser más aconsejable para ciertas empresas. Nosotros hemos optado por un híbrido, ya que ofrecemos un servicio gratuito a largo plazo. Creemos que la mejor forma de conseguir esa relación con nuestros clientes pasa por conseguirle el mejor precio y que renueve con nosotros año tras año.
--Entonces, ¿dónde está vuestro negocio?
--Tenemos tres líneas de negocio. Hacemos de canal de venta con las comercializadoras, que se llevan un flujo de clientes que entran a través de nuestro canal, y nos retribuyen por ello. En segundo lugar, queremos implementar un servicio de pago con asesoría más detallada para los clientes que la requieran, especialmente pymes. Y, por último, el servicio de otros productos energéticos: cargadores eléctricos e instalaciones de autoconsumo.
--¿En qué os diferenciáis, por ejemplo, de Roams, que también tiene un comparador para encontrar la tarifa de luz y gas más económica?
--Hay tres diferencias clave. La independencia, porque nosotros no tenemos acuerdos de patrocinio con las comercializadoras: Roams y otras tienen anuncios, ofertas y descuentos de comercializadoras según el acuerdo preferente que tengan. A nosotros nos interesa el precio final. A veces, no compensa hacer ningún cambio, y así se lo hacemos saber al cliente. En segundo lugar, está la tecnología de estudio: nosotros no somos un listado de precios porque cada suministro es un mundo independiente, con unos patrones de consumo, tarifas enfocadas a particulares o a pymes, etcétera. Por último, la atención personalizada. No nos basta con mostrar el precio, ayudamos al cliente a tramitar el cambio. Le hacemos el trámite de forma gratuita.
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