Los expertos aseguran que cada vez pasa menos, pero la verdad es que todavía hay algunos establecimientos que confunden al consumidor en la forma en la que presentan sus productos. Por ejemplo, el equipo de Consumidor Global ha visitado unas zapaterías en Madrid, que se llaman Step Extreme, y nos ha sorprendido ver que… cuelga una etiqueta de los zapatos que venden bastante confusa para el usuario.
A simple vista nos quedamos con la bandera española y europea de esta etiqueta. Sin embargo, si miramos la letra pequeña no es más que una recomendación para comprar producto español. Pero… ¡Sorpresa! Al darle la vuelta al zapato, en la suela, se puede ver la típica pegatina transparente que nos asegura que el artículo está hecho en China.
'Made in Spain' y diseñado en España no es lo mismo
¿Y qué hay de los productos que pone Diseñado en España? Muchas veces es otro reclamo para que no prestemos atención a dónde se fabrica y se crea el producto en cuestión.
Con una industria zapatera y de calzado muy potente en España, da cierta pena ver que todavía muchos compradores acaban con productos de otros países en sus bolsas. E incluso ahora, con las rebajas en las tiendas, pasa todavía.
Unas prácticas, por suerte, cada vez menos habituales
¿Por qué no se opta por etiquetas o informaciones más claras? Los especialistas que se dedican al calzado en España envían, sin embargo, un mensaje de tranquilidad y aseguran que estas prácticas se han reducido mucho en los últimos años y que se pone muy en valor y de forma clara cuando un producto está hecho en España.
Con los gastos disparados y la inflación que hace temblar a muchos, es normal que la gente se decante por el precio más bajo, pero, a veces, la diferencia no es tan grande en épocas de descuento como la estival y, a veces, sólo hace falta mirar un poco más con detalles y analizar lo que se compra para realizar una adquisición más racional que pasional o impulsiva.