0 opiniones
VIDEOBLOG: 'Data brókers': expertos en sonsacarnos información
¿Somos demasiado descuidados con la gestión de nuestros datos personales? Los expertos recomiendan que los tratemos como si fuese nuestro dinero
Suena el móvil. Es un número desconocido, no está en la agenda. Al contestar, un comercial que dice ser de nuestra compañía telefónica nos ofrece mejorar la tarifa. Pero algo no cuadra. Sospechamos cuando nos pregunta algunos datos que nuestra compañía ya debería saber. Finalmente, hartos, colgamos. Y creemos que solo era otro vendedor pesado tratando de que cambiemos de compañía de teléfono.
Pero no es así. La intención del teleoperador no era vendernos nada (o no solo era eso), sino que también pretendía recabar información sobre nosotros. Obtener datos. Y, probablemente, en apenas 20 o 30 segundos, lo ha logrado. Este tipo de profesionales tiene un nombre: data bróker. Y son muy hábiles en su trabajo.
“Buenos días, le llamo de Vodafone, su compañía telefónica”, pregunta a bocajarro uno de estos data brókers. Y nosotros, despistados, le respondemos: “No, no, se ha equivocado, caballero, mi compañía es Movistar. No vuelva a llamar, por favor”. Pues ya tienen un dato más asociado a nuestro número. Y, si consiguen alargar la conversación, estos data brókers pueden sonsacarnos información que nos parecería increíble.
Con toda esta información (y otra procedente de concursos a los que nos apuntamos gratuitamente o de compañías de las que somos clientes y a los que cedemos nuestros datos de forma irresponsable), estas organizaciones confeccionan amplias bases de datos que utilizarán en el futuro o venderán a otras empresas de telemárketing que seguirán buscando cómo convencernos de las bondades de sus servicios o productos.
Es una suerte de círculo vicioso sin fin de cuyo funcionamiento son responsables --muchas veces de forma inconsciente-- los propios consumidores.
Los expertos advierten de que algunas de estas compañías trabajan al límite de la ley --y a veces más allá-- y su recomendación es muy clara: traten sus datos personales como si fuera dinero: ¿acaso le enseñamos a alguien un billete porque nos pida verlo? Pues lo mismo debemos hacer con nuestros datos, con todos ellos.