Fue en el año 2013 cuando, a raíz de la experiencia y una necesidad personal, José María Ozamiz y Gonzalo García-Miñaur decidieron fundar una plataforma que pusiera en contacto a todos esos fans que se quedaban sin asistir a un concierto por no tener con quién ir. “A mí me pasó con Bon Iver, tenía la entrada, pero no quería ir solo. Lo hablé con Gonzalo y decidimos crear una red social dedicada a la música en directo”.
Wegow comenzó a operar en 2015 para conectar usuarios con idénticos gustos musicales y compartir planes para ir a conciertos. Más tarde llegó el servicio de venta de entradas y otras muchas funcionalidades que hoy hacen de Wegow un marketplace donde están representados todos los actores de la industria musical y que, a diferencia de otras grandes, “ofrecemos una experiencia social completa”. Hablamos con José María Ozamiz, CEO y cofundador de esta plataforma, sobre el sector del directo, la lucha contra la reventa y los famosos gastos de gestión.
--¿Cuál es el papel de una ticketera como Wegow en la cadena de la industria musical?
–Wegow es mucho más que un proveedor de entradas, esa es sólo una funcionalidad más que tenemos. Sobre las ticketeras, creo que a veces no se entiende bien que nosotros somos un intermediario entre el promotor y el cliente final. Ni somos organizadores ni tomamos decisiones respecto al concierto o festival, sólo resumimos la información y se la mostramos de forma sencilla al cliente.
--¿Qué tipo de estilos y conciertos son más frecuentes en la app de Wegow?
–Nuestro objetivo es ofrecer el mayor contenido de música posible al usuario. Además de nuestra oferta propia que trabajamos con unos 2.500 promotores de forma directa, operamos con más de 150 proveedores externos de entradas. Esa información la organizamos y la mostramos de forma personalizada a cada cliente. Actualmente tenemos más de 92.000 eventos publicados exclusivamente de música en 26 países.
--Recientemente han lanzado WeSwap, ¿cómo surge esta funcionalidad y cuáles son los primeros resultados?
–Es una funcionalidad que comienza como otras que ponemos en marcha: escuchando al propio usuario. Wegow es una red social de gente con nombre y apellido que, en esos chats, además de ponerse de acuerdo para ir a un concierto, también se anuncia que al final no se puede asistir a un evento del que ya habían adquirido una entrada. Vimos que era recurrente y decidimos diseñar un sistema seguro y limpio sin posibilidad de dar lugar a la especulación para que cada usuario ponga a la venta de manera sencilla su entrada y quien quiera pueda comprarla con total seguridad.
–¿Cómo funciona?
Todas las entradas tienen que estar adquiridas en Wegow y es cierto que esta funcionalidad sólo es posible si el evento está sold out. Si se pudiera en cualquier momento, el promotor se podría ver perjudicado ya que deja de vender esa entrada que tiene puesta a la venta. Una vez que un usuario le compra a otro su ticket, se invalida el QR original y se genera uno nuevo, lo que da una gran seguridad al comprador.
--¿Cómo es el consumidor de música en directo en España?
–Con los datos que nosotros tenemos, en Wegow el 55 % de los compradores son hombres de entre 18 y 44 años. En cuanto al consumo de conciertos, durante este tiempo han crecido los eventos diurnos o de tardeo y también todo lo relacionado a la escena urbana, pero más allá de eso todo sigue igual. Es a partir de este otoño cuando la música va a experimentar un reseteo y vamos a ver lo que es un año típico. Porque, aunque este verano hemos visto mucho festival y concierto, la mayoría estaban reprogramados por la pandemia. Es por eso que hemos recibido datos muy distorsionados sobre ventas, es ahora cuando hay que poner el ojo para ver si hay cambios en el consumo de música.
--¿Qué diferencia a Wegow de Ticketmaster?
–Por un lado, el hecho de nacer como una red social y estar segmentada por gustos musicales. Ticketmaster sólo vende lo de Ticketmaster. Nosotros, además de lo que vende Wegow, ofrecemos lo que tienen 150 proveedores de entradas y este contenido lo mostramos de forma personalizada para que el contenido que le llegue al usuario sea lo más relevante posible.
--Los fans y su relación con los gastos de gestión. ¿Qué puede decir desde Wegow?
–La gente no entiende que nosotros somos una empresa ajena al organizador y como empresa ajena eso tiene unos costes que se aplican por un servicio que ofrecemos de intermediación entre el promotor y el cliente. El hecho de que no tengas que ir a un punto físico a gastar tu tiempo y tu dinero y que puedas comprar la entrada desde el móvil en cualquier punto del planeta tiene un coste. Nosotros cuando ofrecemos este servicio incurrimos en una serie de gastos como personal, mantenimiento de la plataforma, seguro tecnológico o servidores bancarios. Además, cuando hay cancelaciones, nosotros también gestionamos las devoluciones sin costes añadidos para promotor y cliente.
--¿Cómo se conquista al fan?
–Creo que con la suma de todo lo que hemos hablado. La segmentación del contenido y la posibilidad de ofrecer alternativas al usuario más allá de lo que sabemos que le gusta por similitud de artistas o géneros. En definitiva, dar toda la información de forma muy sencilla para que se pueda organizar con datos sobre alojamiento, transporte y movilidad urbana de los conciertos. Por último, el componente social de poder disfrutar con alguien de ese concierto. La idea es dar todo lo necesario en torno a un evento musical en una sola app.
--¿Qué opina de la aplicación de precios dinámicos para la venta de entradas como hace Ticketmaster?
–Cada uno lleva su estrategia. Nosotros hoy por hoy no lo aplicamos ni tenemos intención de hacerlo. Todos los conciertos y festivales que ofrecemos tienen un precio de salida y es el que acaba pagando cualquier cliente.
--¿Qué música escucha José María Ozamiz y para qué conciertos tiene entradas?
–Pues curiosamente tengo uno pendiente de Bon Iver, que fue con el que se gestó la idea de Wegow en 2013. Compré una entrada y al final me quedé sin poder disfrutarlo porque no tenía con quién ir. Fue cuando le comenté a Gonzalo lo de montar la plataforma. Pues mira, ese es uno de los que tengo pendientes, ahora en noviembre en Madrid.