Eduardo L. (Fujifilm): "Los consumidores de fotografía son mujeres casadas con hijos o mascota"

Cuando Eduardo López entró a trabajar en Fujifilm, para poder ver una fotografía la gente llevaba la película o carrete a revelar y en la tienda imprimían las 24 o 36 fotos, si no había ninguna borrosa, en un papel. Era 1994 y las cámaras digitales acababan de llegar, pero no tardarían en desaparecer para dejar paso a los teléfonos móviles. 

Ahora, este directivo está al frente de la división Imaging de la multinacional japonesa en España, una categoría que engloba desde cámaras instantáneas, carretes fotográficos, impresión de película, cámaras de usar y tirar y hasta contadas cámaras digitales. La familia de las Instax son las más vendidas, pero no ha sido fácil.

--Fujifilm lanzó su primera cámara instantánea en 1998, pero se ha convertido en el producto fotográfico más vendido ahora, ¿a qué se debe?

--Hace 25 años, la fotografía instantánea se trabajaba de una manera muy diferente. Eran los profesionales quienes la utilizaban antes de tomar una fotografía de estudio. Iluminaban un bodegón y disparaban la instantánea para ver cómo quedaba. Para el consumidor de aquella época, la cámara instantánea no era una alternativa analógica porque los carretes dominaban el mercado, y por eso el boom tardó en llegar. 

--Han sobrevivido a varias crisis… 

--El negocio de las cámaras instantáneas estuvo bastante dominado por Polaroid, aunque no existía el atractivo que tienen estos dispositivos hoy en día. De hecho, Fujifilm estuvo a punto de dejar de fabricar cámaras instantáneas y se planteó el cierre de las líneas de producción. Pero hace unos 12 años, se hizo una prueba con cámaras instantáneas en tiendas de fotografía para evaluar el comportamiento de los jóvenes, que ya eran nativos digitales, en países como Indonesia o Malasia. Y todo cambió. 

--¿Qué cambió? 

--Las chicas adolescentes se entusiasmaron con su uso como un elemento diferenciador: podían sacar la foto y tocarla, y eso era una experiencia nueva. La gente joven no conocía la fotografía física. Este caso de éxito se intentó exportar a EEUU y Europa. Al principio, en España intentamos vender la Instax Mini 7 y la 8 a través del canal fotográfico tradicional, pero las tiendas las rechazaban. 

--¿Así llegasteis a las redes sociales? 

--Exacto. Empezamos a trabajar la demanda utilizando las redes sociales. El formato de foto instantánea era similar a Instagram, y así fue como Instagram se convirtió en la palanca que nos ayudó a dinamizar la fotografía instantánea. Empezamos a hacer muchos eventos en los que mostrábamos, a través de influencers, la experiencia que se podía vivir al tocar la fotografía analógica. Y así fue como la gente joven, sobre todo mujeres, empezaron a hacer fotos con el móvil de esas fotos, y las subían a las redes. Este fue el primer boom. 

--Ha habido más…

--Pensábamos que iba a ser una moda pasajera, pero han pasado 12 años y se ha instaurado. En 2023, la fotografía instantánea se utiliza mucho en eventos, cumpleaños, comuniones, bodas, fines de semana y otras experiencias, y ya no la usan solo adolescentes, el público se ha diversificado. 

--¿Vuestro público principal es femenino?

--Sí, el 75% son mujeres en edades comprendidas entre los 16 y 24 años. Ahí está el público principal de la fotografía instantánea. En fotografía en general, el público principal también son mujeres, pero de entre 32 y 38 años, casadas, con hijos o con mascota. Las que hacen un álbum de las vacaciones o del primer año de vida de su hijo. Los hombres, en general, somos más tecnológicos e imprimimos menos. La mujer tiene una sensibilidad mucho mayor con la fotografía física. Aunque con las nuevas generaciones está cambiando un poco. Hay más diversidad.

--A los famosos también les gustan...

--Desde que relanzamos en 2012, ha habido celebrities que se han implicado mucho con la fotografía instantánea. En España ha habido muchos actores, y en EEUU se trabajó con Taylor Swift como embajadora mundial de nuestras cámaras. Hoy en día estamos más relacionados con influencers y con el breakdance y con los eventos Undisputed Masters.

--¿Cómo casa el mundo analógico con el digital?

--Nosotros lo que hemos hecho ha sido converger el mundo analógico de la foto instantánea con las prestaciones del mundo digital. ¿Qué quiere decir esto? Pues hemos empezado a hacer cámaras que integran inteligencia artificial (IA) o realidad aumentada y mejoran la captura de la imagen. Puedes vivir experiencias mientras dibujas en una aplicación y pones el dibujo encima de la fotografía instantánea. Puedes hacer una foto, cargar un código QR y poner el emoticono de una tarta y enviarla a una amiga en realidad aumentada.

--¿Es una mezcla de la inmediatez imperante y la nostalgia por lo analógico?

--La gente joven intenta volver a la experiencia analógica. El ser humano, al final, es analógico. Necesita tocar, oler y sentir. Y esto te lo proporciona un vinilo o una foto instantánea. Hay un cambio en el comportamiento del consumidor debido a la sobreinformación, al sobreuso, hay casi un hartazgo digital y necesitamos coger un libro. Necesitamos dar un paso atrás. 

--¿Dar un paso atrás para dar dos hacia adelante?

--El mundo digital es muy rápido. Es un consumo constante y el contenido desaparece. Detrás de todo esto llega esa reflexión: yo quiero tener una experiencia más reposada. Y la foto instantánea te da esa reflexión. Cuando una foto te cuesta un euro, antes de hacerla, la piensas. O disparas y regalas. Esa es nuestra campaña de los últimos años. Regala algo físico. A tu padre, a tu amigo, a quién quieras. Regala momentos.

--¿Cuántas cámaras instantáneas vende Fujifilm cada año?

--A nivel mundial, en 2018 vendimos unos 10 millones de dispositivos. En España las ventas crecen entre un 10 y un 15% cada año, y en 2022 vendimos alrededor de 250.000 cámaras. Europa es el territorio del mundo donde más cámaras instantáneas se venden, por encima de EEUU y Asia. Además, en Europa el consumidor compra más variedad de modelos.

--¿Cuál es el producto de Fujifilm más vendido?

--La Instax Mini 12 (79 euros) es el producto estrella porque cubre un mayor target de consumidores: desde 12 hasta 22-23 años. En cambio, el resto productos están más enfocados a un público en concreto: chico joven al que le gustan la cultura y la música… La Mini 12 representa el 75% de nuestras ventas, es el producto más económico y un regalo original.

--¿De qué vive Fujifilm en 2023? 

--Pues mira, en volumen nuestro producto más vendido son las cámaras instantáneas, pero, en valor económico vendemos máquinas de resonancias magnéticas que cuestan bastante más… Todo el mundo nos conoce por la fotografía, pero la categoría de fotografía solo es el 14% de la facturación mundial de Fujifilm, y el 50% de este 14% son las Instax. En España son el 55% de la venta de Imaging.

--¿Por qué la revista 'Time' ha seleccionado la Instax Pal, el último modelo de la familia Fujifilm, como una de las mejores invenciones de 2023?

--Nos ha escogido porque es un producto del todo innovador y disruptivo. Es la primera cámara instantánea que no imprime fotografía, sino que hace una captura digital, y si la quieres imprimir, necesitas una impresora. Se asemeja a la fotografía analógica de usar y tirar. La Instax es disparar y que salga, mientras que la pal rompe con eso y busca ir un paso más allá.

--¿Invita a reflexionar?

--Invita a hacer una fotografía más reflexiva, sí, porque requiere pasarla a un teléfono móvil, trabajarla en la app e imprimirla con una impresiona Instax. Rompemos con el disparo-imprimo. Es un paso innovador con el que buscamos que la gente se lo pase bien. Y no hace lo mismo que un teléfono porque no ves la foto al momento. Queda la magia...

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Teo Camino

--Si no tiene impresora, no puede imprimir. Somos consciente de que conlleva un riesgo: nuestro negocio es vender carretes y papel fotográfico, por lo que es un producto que no tiene un retorno automático. Pero nos hemos lanzado a la piscina con esta cámara del tamaño de una pelota de golf que parece un Tamagotchi.

--La suerte está echada...

--¡Alea iacta est!