“Son los años de niñez en que el tiempo no existe, cuando unas horas o un día son cifras de la eternidad. Porque ¿cuántos siglos caben en las horas de un niño?”. Estas reflexiones de Luis Cernuda de su libro Ocnos invitan a la infancia y a regresar al pueblo de los abuelos para frenar el tiempo acelerado de la ciudad adulta. Esa es la magia que tienen los pequeños recovecos de España.
Este encanto se reparte en más de 100 pueblos españoles elegidos por la organización Pueblos Mágicos, que tomó la iniciativa de hacer un pasaporte físico en su nacimiento en 2017. “Empezamos con tres poblaciones --dos en Granada y una de Castellón–. Ahora ya agrupamos 132 con el propósito de que el usuario vea como un juego visitar nuestros pueblos e ir consiguiendo sellos. Es emocionante viajar así”, explica Francisco Martín de Pueblos Mágicos.
Digitalizar el pasaporte
“Cada una de las oficinas de turismo de nuestras poblaciones tienen su sello corporativo. Al final, esto engancha mucho al público”, resalta Martín a Consumidor Global. Desde la entidad sin ánimo de lucro señalan que el pasaporte ha experimentado una evolución este año al pasar del formato papel a también el digital a través de una aplicación. “Nos sumamos a la lucha por la sostenibilidad y rehusamos a usar demasiado papel”, matiza.
“Con el pasaporte físico, una de las cosas que podía ocurrir es que si yo visito la oficina de turismo de una población fuera de horario, pues me quedaba sin mi sello, y era un poco de desasosiego para esos usuarios”, exponen desde Pueblos Mágicos que señalan que, además, con el formato digital ayuda a conocer la trazabilidad del viajero y poder ofrecerle un mejor servicio. El pasaporte es gratuito, tanto en físico como en digital.
Cómo se eligen los pueblos mágicos
Hay pueblos bonitos, históricos, etc. Pero una de las cuestiones más considerables es qué concluye que un lugar se posicione como un pueblo mágico respecto a otro que no lo es. “Nosotros invitamos a esas poblaciones mágicas a que sean mágicas. Pero, previamente, hacemos un estudio técnico sobre sus museos, monumentos históricos, religiosos, rutas, productos locales, sus paisajes, espacios naturales, etcétera. A través de nuestro departamento de patrimonio, validamos si realmente pueden ser pueblos mágicos o no. Hacemos la invitación y luego, las corporaciones municipales, deciden si son o no”, explica Martín.
“Tenemos poblaciones por toda España. En el sur tenemos Zahara de los Atunes, Chipiona o Bornos. En el Norte, tenemos Cangas de Onís o Castropol. Tenemos muchas poblaciones que son muy reconocidas y otras que menos, pero todas son igual de mágicas. Es necesario conocer y emocionarse con nuevos lugares”, apuntan desde la entidad. “Cada año se van añadiendo más poblaciones. Para 2024, está previsto que se añadan al menos 10 poblaciones a nuestra iniciativa”, destaca sin desvelar cuáles serán los pueblos elegidos.
17 rutas mágicas
El pasaporte no sólo contempla el sello de pueblos mágicos, sino que también tiene 17 rutas mágicas. “Cada una de nuestras poblaciones está inserta dentro de una de esas rutas. Por ejemplo, en la ruta asturiana están todas nuestras poblaciones de Asturias. Pero también hay otras rutas que son temáticas como puede ser la Ruta del Jamón Ibérico Extremeño, en la cual están todas nuestras poblaciones de Extremadura y Huelva”, explica Martín a Consumidor Global.
“Con esas 17 rutas lo que intentamos es unificar esas poblaciones de forma sencilla. Para que el usuario, si va a Asturias no solamente vaya a Cangas de Onís, que es muy conocida, sino que haga la ruta al completo”, anuncian desde Pueblos Mágicos. “Esto invita a pernoctar. En nuestra app indicamos dónde pueden dormir, dónde pueden comer, las cosas que no se deben de perder, lo que ayuda a vivir una experiencia más rica”, destacan sobre esta nueva categoría que se añadirá a la app a partir de enero.
Máster Viajero Mágico
Rellenar el pasaporte al completo trae premio. Cuando se alcanza la culminación se llega a ser Máster Viajero Mágico. “Con el pasaporte digital se van sumando sellos de cada población. Lo cierto es que la herramienta lleva desde julio solamente y, de momento, no hay ningún Master Viajero Mágico, para serlo tienes que conseguir el 100 % de los sellos. Seguramente será para el verano que viene y haremos algo especial para esas personas que hayan conseguido este hito”, resalta Martín.
“También regularmente sorteamos viajes y productos locales, pues es muy importante para nosotros dar a conocer ciertos productos de nuestras poblaciones. Además, ofrecemos algunos descuentos en tiendas dentro de nuestras poblaciones”, destacan desde la entidad.
La experiencia
Respecto a la experiencia de los usuarios que disponen del pasaporte de pueblos mágicos, la gran mayoría se sienten satisfechos y emocionados. “Recibimos mensajes de dos tipos. En primer lugar, de aquellas personas que son de esa población y viven como su pueblo va creciendo poco a poco con un turismo sostenible. Y luego está el segundo mensaje, que son los usuarios que descubren esas poblaciones”, describe Martín.
Volver. Descubrir. Parar el tiempo que acelera la ciudad y retenerlo con un sello. Ansiar el próximo viaje y sentir la calidez de un pequeño rincón que desprende magia. Volver a ser un niño que come lentejas en la casa del pueblo de la abuela. Que el día dure todo lo que deba durar, sin que el reloj cuente las horas para ir al trabajo o para ir al gimnasio. Esa es la magia, y sólo hace falta un pasaporte para entrar.