Antonio del Solar, dueño de una tienda de cámaras analógicas en Madrid, se jubila. En un cartel que se encuentra en la puerta de la tienda, se puede leer: “Por jubilación: vendo cámaras analógicas, objetivos, flashes, fotómetros y filtros”. Una usuaria de TikTok se hizo eco de la noticia y no dudó en comunicarlo en la red social. Eso provocó un giro inesperado, debido a que se produjo un malentendido general.
El clip cautivó a más de 1,5 millones de espectadores, lo que generó un impacto positivo en un pequeño negocio local en Chamberí, Madrid. El mensaje central del vídeo es claro: la importancia de apoyar a los pequeños negocios locales en estos tiempos difíciles. La publicación se volvió viral en tiempo récord, generando una avalancha de visitantes hacia la tienda de Antonio.
Por jubilación, no liquidación
La tienda es un auténtico museo. Cientos de cámaras de todo tipo -Nikon, Olympus, Pentax, Kodak, y muchas de ellas de las muy antiguas, de las de muelle- se desperdigan por unos estantes en los que falta sitio para tanto material. Los clientes iban entrando de uno en uno o en grupo y Antonio se tiraba un buen rato con ellos, explicando los detalles de esta cámara o de esta otra: “Mira, con esta de 16 milímetros empezó Kubrick o Spielberg”.
“La persona que vino e hizo fotos dio la sensación de que liquidaba, pero no es así”, reitera Antonio en declaraciones a Epe, y afirma que cuando vino al barrio madrileño no tenía idea de vender, sino de arreglar material. “Poner en funcionamiento un aparato que tiene 80 o 90 años me encanta” asegura Antonio, que entre sus tesoros tiene una Nikon F1 que se hizo famosa en “Vietnam porque aguantaba las condiciones totalmente adversas de los reporteros, el barro, el agua, los golpes…”.