Los vecinos de la localidad guadalajareña de Cogolludo han descubierto con sorpresa que las ruinas de su castillo, reconocido como Bien de Interés Cultural, están a la venta a través de un portal inmobiliario en Internet por 500.000 euros.
El Ayuntamiento de la localidad se ha mostrado interesado en adquirirlo y recuperarlo para sus vecinos, siempre y cuando el precio de venta se adecue a los recursos del municipio. No obstante, "la cifra que podría ofrecer el consistorio cogolludense está muy lejos de la cantidad que actualmente pide su propietario", han indicado fuentes de la alcaldía.
Reformar las ruinas
Desde el consistorio defienden que, en caso de comprar el castillo, un edificio que lleva en ruinas 210 años, lo primero que habría que hacer es una excavación y una reforma. Por ello, explican que no pueden pagar lo que la inmobiliaria pide, ya que establecen una fuerte inversión.
"Serían actuaciones necesarias. La primera para conocer en profundidad el edificio y su origen, y la segunda para preservar los vestigios que aún se conservan, así como para evitar peligros de derrumbe y por supuesto salvaguardar la integridad de las personas, que es lo más importante", ha afirmado el primer edil de Cogolludo, Juan Alfonso Fraguas. Por ello, el Ayuntamiento no pierde la esperanza de que la propiedad se replantee reducir el precio y llegar a un acuerdo para que los vecinos puedan recuperar un edificio emblemático de su historia medieval.
Origen en el siglo IX
El castillo no funciona como elemento defensivo desde el siglo XVII, ya que tenía un funcionamiento oficial, es decir, en él nombraban los sucesivos alcaides de la fortaleza. El último de ellos, tomó posesión de su cargo en 1790.
El castillo fue destruido parcialmente durante la guerra de independencia contra los franceses en el año 1810, quedando como luce en la actualidad. En el año 1949, todos los castillos de España fueron declarados Bien de Interés Cultural, quedando protegidos por esta figura. No obstante, muchos de ellos, son propiedades privadas, y, como tal, sus propietarios los ponen a la venta.