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Vestir como Carolina Monje (que fue pareja de Álex Lequio) no sale por menos de 200 euros

La diseñadora pretende posicionarse en el mercado del lujo español y su objetivo es plantar cara al 'fast fashion' con piezas "únicas y de calidad"

Núria Messeguer

La diseñadora Carolina Monje presenta su nueva colección / CG

En el atelier número 67 de Travessera de Gràcia, en Barcelona, no cabía ni una aguja. Carolina Monje, la que fue pareja Álex Lequio, inauguraba una nueva colección de su línea de ropa. "Es la primera totalmente sostenible, hecha en Barcelona y diseñada por mí. Quería hacer este cambio en mi firma. Es la proyección que yo buscaba", explica a Consumidor Global

Su pequeña firma textil se llama Carola Monje y, aunque la fundó en 2020, está tomando forma ahora."Estoy muy contenta con el proceso", explica la joven emocionada. En las perchas se pueden ver todo tipo de prendas; desde pantalones de pana, a faldas de lentejuelas o chaquetas con estampados geométricos. Todas ellas con estilos muy diferentes, pero con una misma esencia. "Muy oversize y con hombreras", apunta Monje. Eso sí, ninguna de sus creaciones baja de los 50 euros,“pero ninguna sobrepasa los 200 euros", defiende la empresaria.

Acabar con las temporadas, crear fondos de armario

Monje se considera una persona involucrada en el medioambiente y "plenamente animalista". "Creo que el secreto radica en buscar un poco lo que hacían nuestras abuelas. Hoy en día el consumidor no sabe por qué compra, ni para qué”, apunta.

De hecho, desde la firma buscan luchar contra “las continuas nuevas colecciones de las empresas del fast fashion que cada dos semanas añaden productos”. Para Monje, la moda no se basa en seguir tendencias, sino en encontrar buenos fondos de armario.“Una chaqueta de Chanel siempre se llevará. La intención es crear un producto único y duradero, de calidad, pero sin ser tan caro como la alta costura”. 

Carolina Monje en su tienda con una clienta / CG

‘Made in’ Barcelona

Todos los productos de la colección han sido diseñados y fabricados en la Ciudad Condal. “Hasta la tela es de aquí”, remarca la joven. Pero lograrlo no ha sido nada fácil. "La mayoría de talleres piden una producción mínima y no contemplaban un proyecto a tan pequeña escala como el que yo deseaba”, apunta. La firma Carola Monje, defiende, se basa en “diseños propios y  únicos, para dejar de vestir todas iguales”.

Sus prendas se pueden comprar en el atelier donde ha presentado la nueva colección en el barrio de Gràcia, un espacio que no sólo es una tienda, sino “una comunidad de mujeres diseñadoras", según Monje. 

La etiqueta de una de las prendas de la colección / CG