Los dientes son una de las preocupaciones más importantes. La falta de una o varias piezas dentales es algo más común de lo que se cree. Gracias a los avances tecnológicos, ya no hace falta quedarse sin dientes.
Los implantes han solucionado miles y miles de sonrisas por todo el mundo. Ahora, un nuevo medicamento podría sustituirlos en un futuro no tan lejano. Se trata de un tratamiento pensado para personas que carecen de un juego completo de dientes permanentes debido a factores congénitos.
De ratones a humanos
Katsu Takahashi es el investigador principal del estudio. Este odontólogo explica que su objetivo es hacer crecer nuevos dientes. El estudio surgió tras identificar genes que, cuando se eliminaban, hacían que ratones genéticamente modificados tuvieran menos dientes.
"La cantidad de dientes varió a través de la mutación de un solo gen. Si hacemos de eso el objetivo de nuestra investigación, debería haber una manera de cambiar la cantidad de dientes [en humanos]", expone Takahashi en el medio japonés The Mainichi.
La proteína USAG-1
En el año 2005, raíz de estos descubrimientos, observaron que existía una proteína encargada de limitar el crecimiento de los dientes. Se trata de la USAG-1.
Fue entonces cuando el experto y su equipo se centraron en crear un medicamento para combatirla. Es decir, un anticuerpo capaz de bloquear esta proteína en ratones con una cantidad de dientes baja genéticamente.
Próximo reto: probarlo en personas en 2024
Los resultados de esa investigación se publicaron en 2021 y fue todo un éxito. Efectivamente, estos animales habían desarrollado nuevos dientes. Es por ello que el próximo objetivo es probarlo en humanos. Algo que está previsto para julio de 2024.
Los investigadores creen que el tratamiento estará listo para su uso general en 2030. Cuando se corrobore que su uso no tiene efectos nocivos, se pondrá en marcha entre menores de dos a seis años que presenten anodoncia. Esto es la enfermedad que provoca el crecimiento de un número de dientes inferior al normal.