Descubren 29 caramelos con metanfetamina "potencialmente letal" repartidos por una ONG

"Si has recibido alguno de estos caramelos, por favor, no los comas", remarca en su perfil de Facebook la oenegé que ha repartido sin saberlo las golosinas con sabor a piña y una dosis potencialmente letal de metanfetamina en su interior. Este es uno de esos casos en que la realidad supera con creces a la ficción. 

Detectan 29 caramelos con metanfetamina repartidos sin saberlo por una ONG. Los hechos han ocurrido en Nueva Zelanda, y la Policía investiga el hallazgo de una “dosis potencialmente letal” de esta droga en los caramelos distribuidos junto a alimentos por una organización caritativa del país oceánico, que desconocía el contenido de los dulces.

Un asunto de riesgo público

“Nuestras primeras investigaciones indican que los alimentos en cuestión (caramelos con sabor a piña de la marca Rinda) pueden haber sido distribuidos en paquetes de alimentos durante las últimas semanas”, reza el comunicado de la Policía que trata el asunto como prioridad “dado el riesgo público”.

Al menos tres personas, entre ellas dos menores de edad, han recibido atención médica tras ingerir estos caramelos, pero ninguno ha necesitado ser ingresado en un hospital, asegura el inspector Glenn Baldwin.

Caramelos con metanfetamina entre paquetes de alimentos

El oficial también asegura que desde que conocieron que los caramelos tenían droga han contactado con varias personas, pero que la investigación se encuentra en los primeros pasos. “Necesitamos encontrar (los caramelos) lo más rápido que podamos”, remarca Baldwin tras señalar que grupos de narcotraficantes habían tratado de introducir droga en el país camuflada en alimentos, según recoge el medio New Zealand Herald.

La ONG ha cuantificado entre 300 y 400 los paquetes de alimentos distribuidos que contenían estos caramelos, mientras que la Policía asegura que hasta el momento ha podido recuperar 16 de ellos.

La disculpa de la ONG

“Decir que estamos devastados es quedarse corto”, lamenta la directora de Auckland City Mission, Helen Robinson. Los caramelos, envueltos en un plástico amarillo, eran distribuidos por esta oenegé contra la pobreza, que puso una denuncia ante la Policía al conocer el contenido de los dulces.

Asimismo, la ONG asegura que los caramelos fueron donados por una persona sin identificar que los entregó en un paquete de tamaño comercial.

El hallazgo de 3 gramos de metanfetamina por caramelo

Uno de los destinatarios de los paquetes de alimentos contactó con la organización caritativa al detectar un sabor “raro” en los caramelos, analizados posteriormente por la Fundación Antidrogas de Nueva Zelanda.

Sarah Helm, directora de la citada fundación, detalla que cada caramelo contenía unos 3 gramos de metanfetamina. “Una dosis común es de entre 10 y 25 miligramos, así que cada caramelo contaminado contiene más de 300 dosis. Tragar tanta metanfetamina es extremadamente peligroso y podría provocar la muerte”, remarcó en un comunicado Helm.