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"Havrid la viblio": la biblioteca pública de Madrid que lleva casi 4 años cerrada sin explicación
Los 600.000 libros y documentos de la Manuel Alvar, gestionada por la Comunidad de Madrid, no tienen quien los lea
Mil cuatrocientos once son los días que lleva cerrada la Biblioteca Pública Manuel Alvar del madrileño barrio de La Guindalera. Seis mil quinientos ochenta metros cuadrados, divididos en siete plantas, expropiados desde abril de 2019 a los ciudadanos. Seiscientos mil libros y documentos bibliográficos que no tienen quien los lea. Se han llevado la cultura.
“Havrid la viblio”, se puede leer en una de las paredes de la Manuel Alvar --sita en la calle Azcona, 42--, una biblioteca de titularidad estatal cuya gestión se encuentra transferida a la Comunidad de Madrid.
Unos por otros y la ‘viblio sin havrir’
El Ministerio de Cultura y Deporte cerró la Manuel Alvar en abril de 2019 e inició unas obras para subsanar unos problemas de seguridad y climatización. Unas obras que se dieron por finalizadas el 14 de febrero de 2020. Entonces, la Comunidad de Madrid consideró realizar otras actuaciones de mejora del espacio que finalmente “no se han acometido y que ha asumido el Ministerio de Cultura y Deporte”, exponen a Consumidor Global desde el citado ministerio. El 18 de enero de 2023, se publicó en el Boletín Oficial del Estado el anuncio de licitación para dichas obras --el valor estimado es de 3 millones de euros y el plazo para la recepción de ofertas o solicitudes termina el 14 de marzo--.
Aunque todavía no tiene fecha de reapertura, parece que el fin de este cierre, que se ha dilatado sobremanera en el tiempo, está más cerca. Pero, ¿quién tiene la culpa de tal demora y dejadez? La gestión de la Biblioteca Pública Manuel Alvar “se encuentra transferida a la Comunidad de Madrid, siendo, por tanto, gestión exclusiva de la Comunidad de Madrid”, se desmarcan desde el Ministerio de Cultura y Deporte. “Pertenece a la Red de Bibliotecas de la Comunidad de Madrid, pero las obras las está realizando el Ministerio de Cultura y Deporte, según me informan”, apunta la Técnico de Comunicación de los distritos de Centro y Salamanca Eva Mª Pascual.
Las quejas vecinales
“La Biblioteca Manuel Alvar cumple hoy 1384 días cerrada. Esto es un retraso de 1131 días respecto a la previsión inicial”, publicaba el 8 de febrero de 2023 la cuenta de Twitter llamada ¿Cuánto lleva cerrada la Biblioteca Manuel Alvar?, que recoge las quejas de los madrileños para intentar presionar a las administraciones.
“Es una de las bibliotecas públicas con mejores fondos bibliográficos de la Comunidad de Madrid. Su cierre sirve de claro ejemplo del abandono cultural al que nos somete la clase política actual”, critica Daniel C. González en Twitter. Hace unos meses, los vecinos recolectaron más de 10.000 firmas y las presentaron ante la Comunidad.
Dos bibliobuses y una sala de estudio
En lugar de los 6.580 metros cuadrados y los 600.000 documentos de la Manuel Alvar, la Comunidad de Madrid ha puesto a disposición de los vecinos de La Guindalera dos bibliobuses ubicados en la avenida de Los Toreros, 13, y en la avenida de Bruselas, 51-53, con servicio de préstamo.
Por su parte, el Ayuntamiento de Madrid ha habilitado una sala de lectura en la calle Núñez de Balboa, 40. Unas medidas que los vecinos consideran insuficientes.
¿Sufrirán la Pío Baroja y la David Gistau la misma dejadez?
“La biblioteca permanecerá cerrada por obras hasta nuevo aviso”, se puede leer en la página web del Ayuntamiento de Madrid sobre la Biblioteca Pública Municipal Pío Baroja de Arganzuela, que permanece cerrada desde el 1 de agosto de 2022.
Lo mismo se puede leer en la entrada de la Biblioteca Municipal David Gistau, sita en el Centro Cultural Buenavista --avenida de Los Toreros, 5--. La apertura “está prevista para el próximo mes de mayo”, aseguran fuentes del consistorio madrileño. ¿Sufrirán estos dos equipamientos culturales la misma dejadez que la Manuel Alvar?
Una reapertura muy esperada
También en 2019, concretamente en diciembre, cerró la Biblioteca Central Urbana Can Casacuberta de Badalona para llevar a cabo una mejora de las instalaciones. Este lunes 13 de febrero, más de tres años después, vuelve a abrir sus puertas, al fin.
La apertura “era uno de los objetivos principales de nuestro mandato. Ha habido muchos obstáculos, pero gracias al trabajo incansable de los técnicos y de este Gobierno hemos podido abrir un equipamiento esencial en la cohesión social de la ciudad”, manifiesta la regidora de Cultura y Movilidad del Ayuntamiento de Badalona Anna Maria Lara. Más de tres años para instalar una caldera nueva, cambiar el sistema de climatización, poner más enchufes e iluminación, mejorar la accesibilidad y la decoración, y ampliar el fondo bibliográfico. Un trabajo incansable. La cultura es una prioridad.
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