Selenials: los mayores de 55 años son los consumidores más jugosos y vulnerables

Las empresas están al acecho de los usuarios más sénior o selenials y los motivos son bien claros, ya que se trata de un colectivo de millones de personas en España con poder adquisitivo. “En  el sector de la salud y la belleza, estos consumidores acaparan el 47 % del gasto. Y en una década, la mitad de los españoles tendrá más de 50 años.

"El hecho de que la población no crece, sino que envejece, se traduce en un pilar fundamental a la hora de enfocar el márketing de marca”, apunta la experta en branding Emiliana Ongard. 

El efecto Covid en los selenials

La pandemia ha incrementado las compras online de este grupo social, pero también ha puesto de manifiesto la situación de desamparo digital en la que se encuentra el consumidor maduro.

“Las principales barreras se basan en que las empresas no piensan en ellos a la hora de diseñar sus páginas web ni se preocupan, en la mayoría de los casos, por ponerles fácil estos trámites, con vídeos y tutoriales”, insisten a este medio algunos expertos en asesoramiento para mayores. Pese a que tienen los mismos derechos que el resto de la población, están más desprotegidos y son más vulnerables. 

Una generación mayor y con disponibilidad económica 

El término selenial se usa para referirse al público de más 55 años. Son aquellos que pertenecen a la llamada generación silver, impulsados por una mayor disponibilidad económica, el interés por cuidarse y su empeño por adaptarse a las nuevas tecnologías. 

“Se caracterizan por ser inconformistas, tener más tiempo, mostrar interés por cuidarse y por productos naturales con un valor añadido. Eso sí, son conscientes de sus limitaciones y no ocultan su edad. De hecho, la mentalidad ha cambiado y, por ello, su objetivo no es parecer más jóvenes, sino sacar provecho a su edad”, explica la experta Ongard.  

El pilar de la cosmética y la restauración 

El público maduro es el que tira de la industria de la belleza. De los 4.758 millones de euros invertidos en cosméticos cada año en España, 2.190 millones corresponden a este segmento. En concreto, las mujeres mayores de 55 años adquieren este tipo de productos una media de 22 veces al año, superando los 200 euros anuales. Lo que más compran, según datos de Kantar, son cremas faciales (33 %), seguido de perfumes y fragancias (32 %) y maquillaje (12 %).

De hecho, el interés por atrapar al público sénior ha hecho que muchas cadenas de supermercados aumenten su propuesta de marca propia de cosméticos. Mientras, en el sector de la restauración, sólo en 2018, antes de que llegara el coronavirus, los selenials generaron ingresos por valor de 9.598 millones de euros en España. Esto se traduce en el 31,5 % del total, según la empresa de investigación de mercados The NPD Group.

Cumplir años no significa perder derechos 

Pese a que cada vez más mayores se lanzan a la compra online, la brecha digital en este colectivo existe y es alarmante a partir de los 74 años. Por ello, es importante cuidar los derechos de este grupo de consumidores, actuales y futuros, que en algunos casos presentan un determinado grado de vulnerabilidad.

En este sentido, distintas comunidades autónomas, como Madrid, Andalucía y Extremadura, cuentan con guías dirigidas a los consumidores mayores para evitar fraudes. En ellas se ofrecen una serie de consejos generales, como desconfiar de las visitas imprevistas con fines comerciales, no facilitar datos personales a desconocidos y evitar tomar decisiones rápidas y en el momento.