La creatividad y la imaginación es una capacidad muy valorada, no al alcance de todos y que se puede aplicar en innumerables situaciones y sectores. Trabajos de publicidad, arte, música, cine… O también en la producción de espectáculos como los de Live Nation, que ha indignado a los fans de Björk por aplicar cargos de 10 euros a las butacas que se sitúan junto a los pasillos.
“La gente más creativa del mundo trabaja en Live Nation y Ticketmaster. Por desgracia, han elegido emplear su talento en hacer el mal”, bromea en Twitter el usuario Jorge Arenillas. Lo hace publicando una captura del proceso de compra para el concierto de Björk en Madrid. En ella se puede observar un suplemento de 10 euros marcado como “Asientos junto a pasillo”.
“Igual que en un avión”
“Se van a cargar el negocio” o “Yo con estos precios no voy” son algunas de las reacciones de los usuarios a esta curiosa práctica de Live Nation que, si bien se acostumbra a ver en otros sectores como el de las aerolíneas, es poco habitual en los conciertos de música popular.
Precisamente señalando a otros sectores es como la empresa internacional defiende que se realicen estas prácticas en espectáculos de música en vivo. “Es algo que dejamos muy bien explicado y claro para el consumidor. Es igual que cuando se reserva un asiento de avión junto a la ventana o el pasillo, supone una mayor comodidad para el espectador y quien quiera lo puede comprar”, aseguran fuentes de la promotora a Consumidor Global.
Pista dividida nueve zonas
Live Nation aplica una logística distinta de venta de entradas según el formato del concierto y la configuración de los aforos. “Para este concierto, la pista estará dividida en nueve zonas y todo será en sillas”, cuentan. El motivo de distribuir esta zona en varios sectores se debe a temas logísticos de producción.
“Es más fácil tanto para la organización como para los asistentes hacerlo de este modo, ya que se pueden mover con más facilidad”, defienden desde Live Nation. Los asientos junto a pasillo se deben comprar de dos en dos y sólo se ofrecen para determinados espectáculos en los que la configuración del aforo requiere este tipo de divisiones.
“Explotar al fan”
“Es una forma más de explotar al fan y de sacar la mayor rentabilidad de esa experiencia del público”, apunta a este medio Jordi Oliva, experto en industria musical y profesor de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC). “Es una práctica habitual en auditorios y espacios dedicados a la música por temas de cercanía, calidad auditiva o visibilidad. Al final Live Nation lo que hace es aplicarlo en grandes recintos como palacios de deportes y estadios”, explica Oliva.
“De hecho, a nivel musical da absolutamente igual, es más por la posibilidad de poder tocar al artista si baja del escenario, algo que puede ocurrir o no”, matiza el profesor. Oliva opina además que el artista pocas veces es informado de este tipo de prácticas y critica que es una forma más de “rizar el rizo” que tiene Live Nation.
Los precios para ver a Björk en Madrid
Los precios para ver a Björk en Madrid el próximo 4 de septiembre parten de los 55 euros hasta los 125 euros más gastos. Hay dos tipos de entradas VIP, el Hot Ticket desde 175 euros más 23,50 euros de gastos y el Premium Golden Ticket, por 270 euros más 36 de gastos.
En el caso de que aumente la demanda del espectáculo, Live Nation podrá aplicar a las entradas más solicitadas su famoso suplemento Platinum, como ha hecho con otros espectáculos de gran producción como Beyoncé o Madonna. El objetivo de estos suplementos es, según Live Nation “ofrecer a los fans un acceso justo y seguro a las localidades más demandadas que además son las más proclives a ofrecerse en el mercado secundario”.