Aunque en 2021 la pandemia siguió marcando el día a día del turismo, gracias a la vacunación se fueron recuperando los vuelos. Según el Ministerio de Industria, Comercio y Turismo, el incremento de rutas en avión fue palpable, en especial en noviembre, donde fueron cuatro millones de pasajeros los que utilizaron este medio de transporte, lo que supuso un incremento del 52,7 % con respecto a noviembre de 2020.
Aunque hay motivos para la esperanza, gracias a los 125 millones de personas que se desplazaron por aeropuertos españoles en 2021 por los 76 millones de 2020, esta cifra recopilada por AENA está lejos aún de los 275 millones de 2019. Sin embargo, la reducción del número de viajeros no ha ido acompañada por una reducción del número de reclamaciones, sino al contrario: las cancelaciones, retrasos o pérdidas de equipaje se han incrementado.
El doble de reclamaciones con respecto a 2019
La compañía Reclamación de Vuelos cerró el año con más de 25.800 consultas, cifra similar al número de reclamaciones recibidas en el año 2020 y solo un 15 % menos de las de 2019, donde se volaba más del doble que en 2021. Según estos datos y las estadísticas de AENA, en 2021 los pasajeros reclamaron el doble que en 2019. De estas reclamaciones, la plataforma de defensa a los derechos del consumidor concreta que el 26 % corresponden a retrasos, el 14 % a pérdidas de equipaje y el 57 % a cancelaciones de vuelo, con el Covid como principal protagonista.
En cuanto a las aerolíneas, Iberia se convierte en la más reclamada al concentrar un 25 % de las quejas recibidas por la plataforma, seguida de Vueling, con un 19 %, y de Ryanair, con un 7 %.
El 95 % de las aerolíneas rechazan las reclamaciones
Uno de los mayores problemas de los pasajeros en 2021 fue la devolución del dinero de su billete por cuestiones relacionadas por el coronavirus. Aunque desde Reclamación de Vuelos aseguran que la aerolínea debe cumplir sus reclamaciones y que el pasajero está en su derecho de reclamar, concretan que el 95 % de las empresas rechazan las reclamaciones y que este proceso, que puede alargarse hasta un año, muchas veces termina sin que el viajero recupere su dinero.
Sin embargo, Ekaitz Bacelo, director de la plataforma, detalla que si el vuelo es cancelado o retrasado más de tres horas, se puede reclamar una indemnización que llega a los 600 euros, igual que en casos de retrasos o pérdidas de equipaje, por lo que anima a reclamar. Según Bacelo, los pasajeros podrían acogerse al Reglamento Europeo 261/2004, que garantiza su derecho, como mínimo, a recibir el importe íntegro abonado en la adquisición del billete.