Vivir caliente en invierno es una de las grandes comodidades del siglo XXI, pero, con el precio de la energía desbocado, comporta que la factura de gas o electricidad se dispare a fin de mes. Por ello, conocer los errores que hay que evitar al poner la calefacción, puede resultar de gran ayuda.
Basta con aplicar 12 simples trucos para reducir el gasto energético, vivir caliente y que el bolsillo no se resienta tanto.
Los errores más habituales que hay que evitar
Encender y apagar la calefacción con frecuencia es un error que supone un aumento en la factura energética, pues de este modo se consumen más recursos para volver a alcanzar la temperatura deseada.
Abusar de las altas temperaturas o encender la calefacción en todas las habitaciones del hogar son otros errores muy habituales. Regular la temperatura a 19-20 grados y prescindir de la calefacción en las estancias del piso que no utilices supondrá un importante ahorro.
Noche, aislamiento y tarifa
Mantener la calefacción encendida durante toda la noche es un gasto innecesario si se ha tenido la calefacción encendida durante buena parte de la tarde. Otro aspecto a tener en cuenta es el estado del aislamiento de puertas y ventanas: si tiene deficiencias, puede ser una entrada de aire frío y corrientes, además de puntos de fuga del calor de la calefacción.
Siempre es aconsejable revisar la tarifa que se tiene contratada para ver si existen alternativas más ventajosas y económicas.
Calor natural y radiadores despejados
Aprovechar el calor natural --horas de sol-- en determinadas estancias y regular la temperatura o apagar la calefacción sirve para ahorrar en la factura a fin de mes. Al mismo tiempo, habrá habitaciones que conserven mejor el calor --natural o de la calefacción-- y no requieran de tanta ayuda energética.
Los radiadores deben estar libres de objetos para que el calor circule y se expanda por toda la estancia. Igualmente, utilizar los radiadores como tendedero puede ser una solución para secar la ropa, pero también hace que el rendimiento del radiador baje. Todos aquellos que tienen caldera individual deben velar por el mantenimiento de la instalación para que los radiadores funcionen correctamente.
Ventilación y abrigo
En contra de lo que muchos piensan, ventilar a primera hora de la mañana es contraproducente. De hecho, los expertos aconsejan ventilar el hogar durante las horas centrales del día --cuando la temperatura es más alta--.
Como es lógico, el aislamiento térmico que proporciona la ropa es importante y supone una ahorro considerable a final de mes en cualquier hogar.