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Vivir de alquiler en Madrid o Barcelona es más caro ahora, pero ¿dónde sale más barato?
Alquilar una vivienda este abril de 2022 cuesta un 5,18 % que el año anterior, según un informe
Si buscas alquilar una habitación o un piso en Madrid, ya te habrán contado que los precios, en algunas zonas, están por las nubes. De hecho, es vox populi que Madrid y Barcelona son dos ciudades caras para vivir, pero ¿cuánto ha subido el alquiler en estas capitales? ¿Y dónde se puede vivir de alquiler más barato en España?
El precio del alquiler ha subido en 2022. En concreto, alquilar una vivienda en abril fue el 5,18 % más caro que un año antes con el precio del metro cuadrado en 10,17 euros. Y de todas las capitales españolas, sólo siete son más baratas que el año pasado. Según el informe mensual de Pisos.com, la provincia donde los alquileres han bajado más respecto a 2021 es Ourense, que es un 19 % más barata ahora.
¿Dónde sale más barato alquilar un piso?
Las rentas más económicas de abril de 2022 estruvieron en las comunidades autónomas de Castilla y León (4,70 euros por metros cuadrados), Extremadura (5,25) y Castilla-La Mancha (5,46). Sin embargo, la provincia más barata es Cuenca (3,22 euros por metro cuadrado), seguida de Ávila (3,38) y Ciudad Real (3,65). Y la capital de España con los precios más bajos es Zamora (5,57 euros por metro cuadrado). Le siguen Ourense (6,10) y Ciudad Real (6,23).
Por otro lado, las regiones más caras fueron la Comunidad de Madrid (12,78 euros por m²), Baleares (12,09 por m²) y Cataluña (11,56 por m²). Asimismo, en la clasificación por provincias, la primera posición fue para Madrid, (12,78 euros por m²), por delante de Barcelona, aunque por poco (12,60 por m²). En cuanto a capitales de provincia, Barcelona fue la más cara para los inquilinos con un precio medio de 17,37 euros por metro cuadrado. Y le siguieron San Sebastián (15,96 euros por m²) y Madrid (15,80 por m²).
Según la oferta, los precios
Según Ferran Font, director de Estudios de pisos.com, esta tendencia alcista se debe a la inflación. Asimismo, para no ahogar a los inquilinos, “es fundamental que se amplíe la oferta de vivienda arrendada, pues a más vivienda disponible, más se moderan los precios”.
El directivo apunta, además, que “comprar para alquilar después es una alternativa rentable, incluso por encima de otros productos financieros”.
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