Una mano enguantada sujeta a un pollito por las patas y lo golpea, repetidamente, contra el canto de un cubo. En el cuello y en la cabeza, una y otra vez, hasta matarlo. Y después, otro. Y otro. Una acción tan mecánica que parece rutinaria. Varios operarios patean a los pollos ya adultos como quien chuta un balón. Porque sí. Unas imágenes estremecedoras que ponen a Lidl en el punto de mira.
Hace un par de semanas, salió a la luz el maltrato animal en la granja de un proveedor de Lidl en Alemania. Ahora, la violencia contra los pollos que ha destapado Equalia tiene lugar en España, y las dos explotaciones que protagonizan este triste reportaje también están relacionadas con un proveedor de la cadena de supermercados alemana.
Dos empresas que suministran pollo a Lidl
En concreto, las dos macrogranjas se encuentran en Villamanrique de la Condesa (Sevilla) y Roquetas (Tarragona), ambas están vinculadas a empresas que suministran pollo a Lidl, y Equalia ya las ha denunciado por un presunto delito de maltrato animal y contra la salud pública --la gestión de las aves muertas supone un potencial riesgo para la salud pública--.
En la explotación sevillana, “un trabajador alimenta a un perro con algunos cadáveres”, denuncian desde la oenegé. Mientras que, en la catalana, se observa un contenedor roto con pollos en descomposición y larvas. Las imágenes de ambas explotaciones avícolas habrían sido grabadas en 2022 y 2021, respectivamente, según informan desde Equalia.
Acabar con un sufrimiento innecesario
Las grabaciones muestran “la realidad de dos proveedores de Lidl en España”, expone la directora de campañas de Equalia, Julia Elizalde, quien explica que es necesario que esta cadena avance junto al resto de la distribución alimentaria para garantizar estándares adecuados de seguridad alimentaria, bienestar animal y sostenibilidad.
Junto a otras organizaciones de bienestar animal, “hemos iniciado una campaña dirigida a Lidl para solicitar que acabe con el sufrimiento innecesario de los pollos de engorde a nivel europeo”, añade Elizalde. Según la oenegé, las deformaciones son comunes en las macrogranjas avícolas y se producen debido a la selección genética en los conocidos como pollos broiler, que alcanzan el peso de mercado un 400% más rápido de lo que lo hacían hace 50 años. El impacto de un crecimiento tan rápido y una musculación desproporcionada se refleja en la extensa lista de enfermedades que desarrollan.
El Compromiso Europeo del Pollo (ECC)
Ante este sufrimiento innecesario, numerosas organizaciones internacionales de protección animal insisten en la necesidad de implementar nuevas medidas para el sector avícola, y una de sus iniciativas es el Compromiso Europeo del Pollo (ECC, por sus siglas en inglés).
Más de 300 empresas a nivel europeo ya se han adherido a dicho compromiso, que incluye la sustitución de razas de crecimiento rápido por razas de crecimiento más lento y natural. Sin embargo, “Lidl es uno de los pocos grandes supermercados en España que no se ha unido”, recuerdan desde Equalia. Por su parte, fuentes de Lidl se defienden y aseguran a Consumidor Global que, "después de que las conversaciones, lamentablemente, quedaran interrumpidas de forma unilateral por parte de los representantes internacionales del Compromiso Europeo del Pollo en 2021, el grupo Lidl se encuentra actualmente en contacto con ellos para continuar el diálogo".
La postura de Lidl
Al preguntar a la cadena de supermercados alemana por este nuevo caso de maltrato animal en varias macrogranjas españolas, desde el departamento de comunicación exponen que Lidl condena rotundamente los abusos y el maltrato animal que se puedan mostrar en las imágenes y manifiestan su completo rechazo ante cualquier tipo de práctica que vulnere los derechos de los animales.
Y prosiguen: "Lidl tiene un firme compromiso con el bienestar animal y por ello ya hemos contactado con nuestros proveedores para averiguar si realmente esas imágenes se han grabado en una de sus fábricas o granjas. En caso de que así se demuestre, Lidl exigirá a su proveedor que deje de trabajar automáticamente con dicha granja, tal y como se especifica en su política de compras responsable, de obligado cumplimiento para todos sus proveedores. En cualquier caso, a día de hoy, no nos consta ninguna denuncia ni a ninguno de nuestros proveedores ni a ninguna de las granjas con las que colaboran", sentencian desde la cadena de supermercados.