Viagogo es la web por excelencia de reventa de entradas. De hecho, ocupa las primeras posiciones de Google cuando se buscan entradas para algún espectáculo, muy por encima de los portales oficiales. Pero no es la única y, aunque no tenga la misma repercusión, StubHub también se convierte muchas veces en el último remedio de los fans para ver a sus artistas favoritos con entradas a precios hasta 20 veces por encima de su valor real.
Y el ejemplo más reciente viene de la mano del músico y compositor Leiva. Hace unos días, el exlíder de Pereza anunciaba el fin de gira de su último álbum en Madrid. El recinto elegido, el icónico WiZink Center, y las fechas, Navidad. La alta demanda del espectáculo llevó a la agencia del artista a anunciar dos fechas más para tocar en la capital.
Leiva y sus tres conciertos agotados
En total serán tres las noches en las que el madrileño se subirá al escenario de este conocido recinto los días 19, 25 y 26 de diciembre de 2023. Las entradas se agotaron en cuestión de minutos y en este momento es imposible hacerse con una en los portales oficiales. Ahí es cuando entra en juego StubHub.
Aunque los canales oficiales no tengan entradas a la venta, muchos de los tickets que volaron tan rápido ahora no están en manos de los fans del artista, sino que han ido a caer a páginas como StubHub, es decir, a la reventa. Una vez que pasan a este sistema, comienza la guerra de precios.
De 50 a 1.000 euros
Así, si un ticket para la grada baja del WiZink tenía un precio de 50 euros en los canales oficiales, en SubHub hay quien la está revendiendo por 1.000 euros. Una desorbitada cifra que nada se corresponde con la realidad. Ante esta situación, la propia agencia del artista y promotora de los conciertos se muestra crítica y contundente.
“Tratamos de poner precios justos y proporcionados a las entradas y nos encontramos con que se crea una imagen irreal acerca del valor de las mismas, ya que la existencia de este mercado paralelo de compra de entradas distorsiona de forma grave las relaciones entre comprador y vendedor”, explica la empresa Attraction Management.
El desastre del PDF duplicado
Además, desde esta oficina recuerdan que el comprador de reventa “no solo paga un precio desorbitado, sino que no tiene la garantía de que esas entradas no sean falsas ni duplicadas”. El formato PDF alimenta las estafas y los coladeros de entradas falsas por su facilidad para ser replicadas.
Xavi Manresa, promotor y fundador del sistema de venta de entradas Tiketblok explica los riesgos de este formato. “Con el PDF puedes duplicar y revender tantas copias como quieras. Hace falta un sistema de ticket digital, para que cada asistente esté identificado y cada entrada se asigne a un solo móvil. Así, el código QR no se puede transferir a nadie”, señala.
Un “timo absoluto”
La experiencia de aquellos que han recurrido a StubHub suele ser negativa. Basta con echar un vistazo a portales de opiniones como Trustpilot para conocer cómo opera esta página. “Se cambió la fecha del evento de las entradas que compramos y StubHub no nos hizo el reembolso, tampoco nos dejaba contactar con el vendedor para poner una solución”, escribe Ana Gometza.
Nacho de la Fuente tacha de “timo absoluto” su servicio. “Es imposible evitar que la entrada en PDF no sea revendida varias veces. El que quiera forrarse, que se dedique a revender entradas en este portal”, ironiza.
Ticket digital y personalizado
Consumidor Global ha preguntado al equipo de comunicación de StubHub por su forma de operar y cómo responde a las críticas de promotores, artistas y clientes, pero no se ha obtenido respuesta al término del artículo.
Mientras, la conclusión que no paran de repetir artistas y promotores es la misma: “No compres en la reventa”. Pero, ¿cómo se lucha contra la frustración de las largas colas virtuales y la desesperación por conseguir un ticket? Evitar pasar por el aro e ignorar las páginas de reventa es primordial, pero también es necesario un compromiso por parte del sector para dar con fórmulas que faciliten la compra de entradas oficiales a precios justos. De momento, todo apunta al ticket digital como solución a este problema.