Desde 1901, la bombilla de incandescencia que ilumina el cuartel de los bomberos de Livermore (California) no se ha cambiado. Es la bombilla más antigua del mundo, según el Libro Guinness de los Récords, y lleva más de un millón de horas encendida. En 2022, las de led duran hasta 50.000 horas, y las halógenas rozan las 2.000. Esto tiene un nombre: obsolescencia programada. Y, también en la actualidad, numerosos clientes de Apple se quejan de que sus auriculares con cable, los EarPods, dejan de funcionar en tiempo récord: “se me han roto dos en un mes”.
Es el caso de Roger A., que siempre ha utilizado los EarPods (19 euros) porque se dedica a producir y componer música, y le gusta la calidad de sonido de los auriculares de Apple. El problema es que “se rompen demasiado a menudo”, expone este joven a Consumidor Global, quien asegura que los intenta cuidar, pero que ya no sabe cómo enrollarlos ni cómo guardarlos con más cuidado para alargar un poco su vida útil.
Dejan de funcionar en tiempo récord
Al principio, le duraban alrededor de medio año, pero “la última vez se me rompieron dos en un mes”, explica Roger, quien asegura que o bien uno de los dos cascos deja de funcionar o se rompe el cable. Ahora, al no encontrar unos EarPods disponibles por rotura de stock y tras su mala experiencia, se ha comprado los AirPods (entre 149 y 629 euros) a pesar de que su precio “es 15 veces superior”.
Al igual que él, son muchos los usuarios de Apple que se quejan de lo mismo en Amazon. “A las dos semanas uno de los auriculares ha dejado de funcionar”, lamenta Andrés. “Los he usado poquísimo y en un mes ya no se escucha por uno”, apunta Itziar. “Los compré el 11 de febrero y el 11 de mayo han dejado de funcionar. Es como tirar el dinero”, se queja Benito sobre los EarPods.
Más sostenibles que resistentes
Uno de los problemas es que “Apple utiliza un material ecológico para el recubrimiento del cable que es de una calidad inferior a la que emplean el resto de marcas”, expone el subdirector de la Facultad de Ingeniería de la Universidad Autónoma de Barcelona experto en computadores, Antoni Espinosa, quien asegura que el recubrimiento del cable de los EarPods se degrada y es poco resistente. “Se cae a trozos, ves el cable por dentro y deja de funcionar. A mí me ha pasado”, añade Espinosa.
“Tienen muy buena calidad de audio, pero es cierto que Apple los fabrica con un plástico biodegradable que los hace un poco más delicados”, coincide un empleado de Macnificos, un distribuidor autorizado de accesorios y componentes de la marca estadounidense. Si se estiran o se enganchan con algo, “se pueden estropear, pero yo creo que seis meses o más, si los cuidas bien, te pueden durar”, añaden desde el distribuidor de Apple, quienes aseguran que, por una cuestión de higiene, “los auriculares no se pueden devolver”.
Coleccionistas de EarPods
V. R. tiene como móvil personal un iPhone desde 2017 y no se ha comprado ni uno, ni dos, ni tres EarPods. “No te puedes imaginar la de auriculares que me he comprado…”, explica este afectado. “Antes duraban más. Cuatro o cinco meses. Pero ahora duran poquísimo. Lo que suele pasar es que deja de funcionar un auricular”, añade.
“Te duran uno o dos meses. Es un robo, pero no quería pasarme a los AirPods y darle a Apple más dinero todavía”, explica este afectado, que ahora utiliza unos de la marca Realme que funcionan “muy bien”.
Las mejores alternativas a los auriculares de Apple
En PcComponentes también reconocen que el material que emplea la compañía de la manzana mordida para ‘proteger’ el cable de los EarPods hace que duren menos que los de algunas marcas de la competencia. “Yo te recomendaría unos Xiaomi Mi Basic (5,19 euros), que cuestan cuatro veces menos que unos EarPods y son más resistentes”, asesora un empleado de esta tienda especializada.
Los Earphones 5 de Energy Sistem (20,99 euros), por ejemplo, “son más resistentes que los EarPods e incluyen una cajita para enrollarlos y guardarlos bien, que es muy importante”, aconsejan desde el servicio de audio de Fnac.
Forzar al consumidor a comprar unos AirPods
“Apple bajó la calidad de este producto hace años para intentar forzar al consumidor a que se decante por la tendencia del momento: los inalámbricos”, resume Espinosa sobre la supuesta estrategia de la compañía estadounidense para que sus usuarios utilicen dispositivos más avanzados con precios, también, mucho más elevados.
Sin embargo, este especialista asegura que se trata de una decisión “extraña”, ya que Apple ha mejorado en el tema de la obsolescencia programada. Seguramente, los coleccionistas de EarPods no opinen lo mismo.