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El agua con gas se convierte en la bebida de moda este verano: ¿Qué mitos hay en torno a ella?

Desde SodaStream explican las verdades sobre el líquido gasificado que cautiva cada día a más paladares

Consumidor Global

Un vaso lleno de agua con gas / PIXABAY

Este verano, una de las bebidas de moda ha sido el agua con gas. Así lo confirma un estudio de SodaStream, una de las maras más reconocida das a nivel mundial en consumo de este líquido gasificado. Sin embargo, en torno a esta bebida se han creado diversos mitos. Es por ello, que la empresa explica las verdades sobre esta peculiar bebida.

Uno de las populares creencias que hacen dudar a muchos ciudadanos es si “beber agua con gas hidrata menos que beberla natural”. Sin embargo, la compañía desmonta esta mentira y afirma que el agua con gas es agua infusionada con gas carbónico, por lo que hidrata exactamente igual.

Los mitos del agua con gas

“Ayuda a reducir el consumo de refrescos tradicionales”. Tal y como cuenta SodaStream esto es una realidad, ya que las “burbujas contenidas en el agua carbonada nos aportan la misma sensación burbujeante que un refresco tradicional”.

Una persona vierte agua con gas de una botella a un vaso / PEXELS

Sin embargo, lo que sí es completamente falso es el mito de si “beber agua con gas engorda”. Sin embargo, al igual que la normal, esta carece de calorías. “De hecho, al beberla gasificada, el usuario siente una mayor sensación de saciedad que al beberla sin gas, lo que se traduce en una menor ingesta de alimentos”, apuntan desde la empresa.

Aumenta el consumo de agua con gas

“Beber agua con gas mejora la salud”. Es una realidad que esta bebida con burbujas es beneficiosa para nuestro sistema digestivo y circulatorio. Además, está especialmente recomendada para personas que sufren problemas intestinales como estreñimiento o dolor de estómago.

Por otro lado, ayuda a reducir el colesterol malo a la vez que segrega colesterol bueno. Y, el ácido carbónico actúa como un potente vasodilatador, por lo que contribuye al buen funcionamiento de nuestro corazón. Por todas estas razones, el número de consumidores de agua con gas no ha parado de crecer: hidrata, refresca y no engorda.