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No, tus monedas antiguas no valen nada: así te engatusan con tasaciones falsas

Los precios que circulan en internet para las pesetas de Franco generan falsas esperanzas en los particulares y enfadan a los numismáticos

Teo Camino

Algunas monedas apiladas / PEXELS

Soñar que se encuentra un tesoro, y, en ese preciso instante, despertarse y darse cuenta de que se trata de una ilusión. Algo parecido les ocurre a los cientos de españoles que acuden cada día a las tiendas numismáticas -especialistas en monedas y medallas- de nuestro país con la intención de cambiar sus monedas y billetes viejos por una auténtica fortuna, sin saber que han sido víctimas de una información imprecisa y tendenciosa en la red.

La emoción se desvanece de inmediato cuando el coleccionista les asegura que sus monedas de Franco, por poner un ejemplo, no valen nada, que las hay a patadas y que se compran a peso porque lo único que tiene valor es el metal. Y es que las únicas pesetas del siglo XX que tienen demanda entre los expertos son pruebas de acuñación --tiradas cortas de monedas que jamás circularon--, monedas con malformaciones de las que existen muy pocas unidades en buen estado, y otras rarezas únicas. “Es más probable encontrarte un Picasso en el desván”, apunta a Consumidor Global Adolfo Ruíz, de Blog Numismático.

Tasaciones 'fake' y otros bulos

“Cada dos por tres viene gente que dice que ha visto por internet que sus monedas valen 3.000 euros”, explica Javier Fuster, de Numismática Universal, y añade: “pero lo cierto es que no valen nada”.

Los expertos coinciden en que el malentendido, cuyo origen es muchas veces una mala praxis provocada por la constante búsqueda del clic, es fruto de “informaciones abiertas que no precisan nada y confunden al lector”, apunta Fuster.

La triste realidad

Y es que la red está llena de titulares engañosos como: “¿Dónde puedes vender una moneda de cinco pesetas por 20.000 euros?” o “si tienes una de estas monedas podrás venderlas por miles de euros en Madrid” e incluso expresiones como “quizás guardas un tesoro en tu casa sin saberlo”. Estos titulares, sin embargo, no se ajustan para nada a la realidad y molestan a los numismáticos.

Una moneda de 5 pesetas de 1949 con el busto de Francisco Franco / PIXABAY

“Nos tienen fritos. Algunas publicaciones agarran un catálogo de monedas y dicen que las cinco más caras valen un pastizal. Y si tienes un Modigliani tienes 25 millones de dólares... Todos tenemos pesetas en casa, pero esas no valen nada. Lo peor es cuando viene una persona que necesita dinero y le cuentas la triste realidad, se te rompe el corazón”, se queja Ruíz.

Las monedas más buscadas

La ley de la oferta y la demanda hace que las monedas antiguas que tienen un gran valor sean las que casi nunca se ven. “La posibilidad de encontrar una moneda única en casa es del 0,001%”, advierte Fuster, quien asegura que las únicas pesetas que tienen cierto valor son la peseta de 1946, con el busto de Franco diseñado por Mariano Benlliure y las estrellas 19-48 dibujadas en el anverso, de la que se hicieron alrededor de 180 unidades y que puede valer hasta 3.000 euros; y la que se hizo el año posterior que, dependiendo de las estrellas, puede estar valorada en 100, 200 o 500 euros. 

En este sentido, Ruíz explica que las monedas son el producto industrial que más se ha fabricado en la historia, por lo que “de cualquier moneda del siglo XX que haya entrado en circulación, sólo una de cada 10 millones vale varios cientos de euros”. Para este especialista, la moneda de 5 pesetas de 1949 con estrellas 19-52, de la que se hicieron seis ejemplares que jamás se pusieron en circulación, puede valer hasta 30.000 euros. “Salvo que tu abuelo fuese Ministro de Hacienda o el Gobernador del Banco de España de la época, no las tendrás en casa”, matiza Ruíz.

Qué hacer con las monedas antiguas

Muchos usuarios acuden a estas tiendas pensando que tal vez se harán ricos, pero, al ver la realidad, se preguntan qué pueden hacer con las monedas viejas que acumulan. “Yo de entrada les digo: id al Banco de España y cambiadlas, que aún estáis a tiempo. Y las de Franco, a precio de metal, a un euro el kilo. Y si valen algo, cosa muy rara, rastrea el mercado y véndesela al que más te pague”, explica Fuster, quien apunta que los catálogos de precios son sólo orientativos y que el valor está en los detalles y la buena conservación de las piezas únicas. “Lo primero que hay que pensar es: si tu abuelo se gastó el sueldo de un año en una moneda, lo normal es que esa moneda valga dinero. Si no es así, no pierdas el tiempo”, sentencia Ruíz.

Los expertos opinan que el nivel de monedas que circula por Wallapop es muy bajo, que algún profesional serio tiene página en eBay, pero que en general abundan los piratas y los ignorantes, y que la mejor manera de comprar o vender monedas y billetes antiguos que puedan tener cierto valor es a través de las casas de subastas más conocidas porque, al menos, ofrecen una garantía.