Da igual si es cubertería o joyas, todo aquello que esté bañado en plata termina perdiendo el brillo original y, además, tiende a oscurecerse. Esto ocurre debido a la composición de estos objetos que no suelen ser plata al 100%.
Existen muchos agentes externos que afectan a la calidad y resistencia de la plata. El PH de la piel, las cremas hidratantes, los jabones, el cloro de la piscina en verano, la playa o el sudor. Inevitablemente, se termina generando una reacción química que afecta a la apariencia de la plata. Pero existen diferentes formas de recuperar su aspecto original. Un trucos sencillos que se pueden elaborar con productos de limpieza que cualquiera tiene en casa.
Cómo limpiar la plata cuando se pone negra
Cuando un objeto de plata se pone de color negro, hay que respetar una serie de pasos para quitar esas manchas. En primer lugar, es muy importante utilizar guantes de látex que protejan a la piel y a la propia plata evitando que queden huellas.
Los expertos subrayan la necesidad de usar un trapo blanco y suave. De esta forma, se evita arañar la moneda, joya o cubertería de plata que tan delicada es. Antes de limpiar las joyas, es importante analizar qué otros materiales lleva incrustados. Si son elementos especialmente sensibles será mejor no utilizar los remedios más agresivos.
Cómo limpiar la plata con productos caseros
Para limpiar la plata en casa existen muchos trucos. Pese a ello, no todos demuestran la misma eficacia y algunos de los ingredientes utilizados pueden sorprender.
Productos caseros como el bicarbonato, papel de aluminio, pasta de dientes, kétchup o limón son unos buenos aliados para recuperar el brillo de la plata. Te explicamos el paso a paso.
Bicarbonato de sodio y vinagre
Un clásico de la limpieza del hogar es la combinación del vinagre y bicarbonato. Ambas sustancias son conocidas por su capacidad para acabar con las manchas y el mal olor pero también es posible usar la mezcla para limpiar la plata.
El remedio casero consiste en añadir una o dos cucharadas de bicarbonato en un bol con agua. Luego, hay que añadir el vinagre poco a poco hasta que se forma una pasta. Esta hay que untarla sobre la pieza y frotar bien para retirar posteriormente con un trapo limpio.
Papel de aluminio y detergente en polvo
El truco del papel de aluminio es sencillo. Se trata de cubrir el fondo de un recipiente con este tipo de papel. Hay que añadir un poco de agua caliente y un puñal de detergente en polvo.
Luego, basta con sumergir el objeto y dejarlo en remojo durante unos diez minutos. Es importante secar bien la plata una vez finalizado el proceso.
Kétchup
Aunque parezca increíble pero la plata se puede limpiar con kétchup. ¿Cómo? Hay que verter un poco de esta salsa de tomate sobre la plata.
Es necesario dejar un tiempo de reposo de unos 20 minutos y, transcurrido este tiempo, solo hay que aclarar con agua fría y secar muy bien.
Limón y sal
Tanto el limón como la sal son dos básicos que no faltan en la despensa de la cocina. Para limpiar la plata, hay que exprimir el limón y mezclar el jugo con dos o tres cucharadas de sal.
Una vez hecho esto, se añade un poco de agua caliente y se introduce la plata durante cinco minutos. Se retiran los restos con un trapo y se seca la pieza.
Pasta de dientes
Otro imprescindible que no falta en ningún hogar es la pasta de dientes. Funciona muy bien para recuperar el brillo y, además, es un remedio casero sencillo.
Con un cepillo de dientes que nadie use hay que ir esparciendo la pasta de dientes llegando a cada rincón del objeto de plata. Una vez que esté limpio, hay que retirar el producto con agua templada.
Cada cuánto limpiar la plata
Mucha gente se pregunta cada cuánto tiempo deben limpiar sus joyas de plata. Pues bien, lo cierto es que la frecuencia depende del uso y la exposición de la pieza.
El mejor indicador es cuando el propio usuario note que la plata está empezando a perder su apariencia original. En general, esto suele ocurrir cada dos o tres meses.