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Soy médica y te explico cómo combatir la alergia primaveral con estos 25 alimentos

Los alimentos ricos en vitaminas, minerales, omega-3 y con propiedades antiinflamatorias y antioxidantes ayudar a fortalecer el sistema inmunológico

Teo Camino

Una persona con alergia primaveral / PEXELS

La naturaleza está en plena efervescencia durante la primavera, lo que conlleva una elevada concentración de polen en el aire que hace que muchas personas sufran los molestos síntomas de la alergia primaveral. En concreto, más de ocho millones de españoles sufren de alergia primaveral y la cifra aumenta año tras año, según los datos de la empresa especializada en suplementos naturales para la salud vaDiet.

Entre otros remedios, algunos alimentos ayudan a reducir los síntomas de la alergia primaveral y modular el sistema inmunológico, aliviando a las personas alérgicas. Sonia Clavería, médica de familia del Departamento Técnico de noVadie recomienda los siguientes.

Cómo aliviar los síntomas de la alergia primaveral con alimentos

La vitamina D desempeña un papel importante en la regulación del sistema inmunológico, ayuda a reducir la incidencia y gravedad de las alergias y se puede obtener de la exposición solar y de alimentos como los pescados grasos (trucha, salmón, atún, caballa...) o la yema de huevo

Una tostada con salmón y queso fresco / PEXELS

El jengibre, conocido por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, la cúrcuma y el ajo, que contiene compuestos sulfurados que tienen propiedades antiinflamatorias y ayudan a mejorar la respuesta inmunológica del cuerpo, también sirven para combatir los síntomas de la alergia primaveral. Y cítricos como naranjas, limones, mandarinas, limas y pomelos son ricos en vitamina C, que tiene propiedades antioxidantes y contribuye a reducir la inflamación, además de fortalecer el sistema inmunológico.

Naranjas a granel en un supermercado parecido a Lidl / PEXELS

Omega-3, manganeso, quercetina y grosellero negro

Los ácidos grasos Omega-3, presentes en pescados como el salmón, la caballa y el atún, y en las nueces y en las semillas de lino y chía presentan propiedades antiinflamatorias que pueden ayudar a combatir los molestos síntomas de las alergias primaverales. Por su parte, el manganeso es un mineral esencial que desempeña un papel fundamental en la función inmunológica, además de mejorar las mucosas. Algunas fuentes de manganeso son las nueces, las semillas, los vegetales de hoja verde y el.

Un bote con almendras y nueces / PEXELS

El extracto de grosellero negro, que reduce la inflamación y mejora los síntomas de la rinitis alérgica estacional, y la quercetina, un flavonoide con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias que está presente en las manzanas, las cebollas, el brócoli o el té verde, también son de gran ayuda para minimizar las alergias.

Champiñones y brócoli congelados junto a otras verduras / PIXABAY

Cómo saber si tienes alergia primaveral

La principal causa de la alergia primaveral es el polen que se libera en el aire durante esta época del año, lo que provoca una respuesta inmunológica por parte de nuestro organismo y la liberación de histamina, produciendo una serie de síntomas, como los siguientes:

  • Estornudos frecuentes: los estornudos repetidos son uno de los síntomas más característicos de la alergia primaveral y se producen por la irritación de la mucosa nasal.
  • Picazón en la nariz, garganta y ojos: la exposición al polen puede causar un picor intenso en la nariz, la garganta y los ojos, lo que resulta muy incómodo para la persona que lo sufre.
  • Congestión nasal: la inflamación de los tejidos nasales como respuesta a los niveles altos de histamina dificulta la respiración normal y causa una desagradable sensación de presión en las fosas nasales.
  • Goteo nasal: la secreción nasal acuosa está causada por la inflamación y la irritación de las mucosas nasales, y es uno de los síntomas más frecuentes de la alergia primaveral.
  • Tos: la irritación de la garganta debido a la congestión provoca tos persistente en algunas personas alérgicas.
  • Ojos llorosos y rojos: también es típico que se irriten los ojos, provocando enrojecimiento, lagrimeo y sensación de ardor o picazón.
  • Fatiga: la alergia primaveral, especialmente cuando es persistente, llega a causar fatiga y un cansancio generalizado.
  • Dolor de cabeza: como resultado de la congestión nasal y la sinusitis pueden darse dolores de cabeza más o menos intensos.

Otras formas para aliviar la alergia primaveral

  • Evitar la exposición al polen

Evitar salir de casa o no pasar por los lugares con más concentración de polen especialmente durante los días secos y ventosos, cuando la concentración de polen en el aire es más alta. En la vivienda y en el automóvil, mantener las ventanas cerradas y utilizar aire acondicionado con filtros de aire específicos para el polen. En los desplazamientos por la vía pública o si se va a pasar tiempo al aire libre, utilizar una mascarilla para reducir la inhalación de polen.

  • Usar gafas de sol y gorra

Las gafas de sol ayudan a proteger los ojos del polen y contribuyen a reducir la irritación ocular. También resulta conveniente usar gorra o sombrero para evitar que el polen entre en contacto con la cara y se deposite en el cuero cabelludo.

  • Ducharse y cambiarse de ropa al llegar a casa

Al regresar a casa después de estar en la calle, ducharse y cambiarse de ropa para eliminar el polen que pueda haber quedado adherido en la piel y en la ropa. Además, esta medida contribuye a reducir la cantidad de polen dentro del hogar.

  • Utilizar soluciones salinas nasales

El lavado nasal con soluciones salinas ayuda a limpiar las vías nasales y reduce la congestión. Se puede utilizar una solución salina comprada en la farmacia o prepararla uno mismo con agua tibia y sal.

  • Aplicar compresas frías en los ojos

Si la persona tiene irritación y picazón debido a la alergia, aplicar compresas frías sobre los ojos aliviará la incomodidad y reducirá la hinchazón.

  • Consultar a un alergólogo si es necesario

Si los síntomas de la alergia primaveral son graves o interfieren significativamente en la calidad de vida de la persona, consultar a un médico o alergólogo, quien valorará posibles tratamientos como antihistamínicos, descongestionantes o aerosoles nasales para controlar los síntomas de manera más efectiva.