Ni dinero ni amor: la fórmula de la felicidad en las mujeres a partir de los 40, según Harvard

Parece que socialmente hay que haber conseguido todas tus metas en la vida a partir de cierta edad, un concepto completamente erróneo por el que encontramos multitud de personas deprimidas a partir de los 40. Y es que no son pocas las personas que ven imposible plantearse nuevos retos a partir de la mediana edad, un error garrafal. Esta etapa es crucial para nuestra vida si queremos redirigirla de forma plena y feliz.

La mediana edad es un período que invita a la reflexión y la reinvención personal, lleno de desafíos y oportunidades para crecer de un modo más libre. Según Robert Waldinger y Arthur Brooks, estudiosos y expertos en felicidad de la Universidad de Harvard, esta fase puede ser el punto de partida para cambiar nuestra mente hacia una vida más plena y satisfactoria... ¿Pero cómo podemos saber el secreto para ser felices a partir de los 40?

La mediana edad: una etapa para descubrir la plenitud y redefinir la felicidad

Cuando pensamos en esta etapa, muchas veces la asociamos con haber alcanzado grandes logros, tener cierta estabilidad económica o haber encontrado un equilibrio entre experiencia, amor y vitalidad.

Sin embargo, desde dentro, la mediana edad puede sentirse diferente, pues muchas veces se llega a esta edad sin todo aquello que socialmente nos dijeron que debíamos poseer. Waldinger explica sabiamente la necesidad de poner un poco de freno a los ideales impuestos: "Para algunos, esta etapa es sinónimo de confianza y seguridad, pero para otros puede parecer una meseta, una sensación de estancamiento". Entonces, ¿cómo encontrar la chispa de la vida que nos ayuda a sentirnos vivos y vibrantes en esta etapa de la vida?

La llave para revitalizar la mediana edad: un cambio de perspectiva

La mediana edad es un momento para detenerse a pensar, mirar hacia atrás y evaluar lo vivido hacia dentro. Es inevitable darse cuenta de que parte de nuestro tiempo ya ha quedado atrás, y esto puede llevarnos a preguntas difíciles: ¿Es esta la vida que quería? ¿Esto es todo lo que puedo lograr?

Waldinger tiene una respuesta clara a la sensación de vacío que a muchas personas les asalta: “La mediana edad no es un destino final, sino un punto de inflexión. Es una oportunidad para transformar nuestra vida, no solo hacia dentro, sino hacia fuera”. Este cambio de enfoque nos hace considerar cómo podemos impactar positivamente a los demás con nuestra experiencia.

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Generatividad: la poderosa fuente de satisfacción en la mediana edad

En psicología, este concepto tiene un nombre: generatividad. Este término describe nuestra capacidad para contribuir a las generaciones futuras, para transmitir lo que hemos aprendido y dejar un legado. Pero, ¿cómo se traduce esto en la vida diaria y por qué es tan poderoso para nuestra felicidad?

El psicólogo Erik Erikson explica la generatividad como uno de los pilares del bienestar en la madurez. Esta nueva etapa puede aparecer entre los 30 y los 65 años, puesto que tenemos la necesidad de trascender y contribuir a algo más grande que nosotros mismos. Esta búsqueda de propósito no solo nos mantiene activos y más optimistas sobre el futuro, también genera en nosotros una profunda satisfacción y nos acerca a ese sentido de la vida.

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El propósito de compartir la experiencia

Arthur Brooks, otro experto en felicidad de Harvard y autor de La madurez inteligente, ejemplifica este concepto con la vida del compositor Johann Sebastian Bach, quien supo reinventarse en su mediana edad y encontró una nueva fuente de alegría al compartir su conocimiento con otros.

La generatividad puede tomar muchas formas: desde criar hijos hasta guiar a los más jóvenes en sus carreras, participar en causas sociales, compartir nuestras experiencias o enseñar habilidades que hemos perfeccionado a lo largo de los años.

Reinventarse en la madurez

En su juventud, Johann Sebastian Bach fue considerado uno de los mejores compositores de su tiempo. Su música barroca marcó una época, pero con la llegada del estilo clásico, su popularidad disminuyó.

En lugar de frustrarse por haber quedado fuera de las tendencias, Bach optó por un enfoque distinto: abrazó su rol como maestro. Según Arthur Brooks, Bach encontró en esta transformación una fuente de alegría y propósito. “Rediseñó su vida para amoldarse a sus habilidades cambiantes, dejando atrás el deseo de fama para concentrarse en el amor por la música y el servicio a los demás”.

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La fórmula secreta para ser más feliz en tu vida diaria a partir de los 40

¿Seguramente tú también te has sentido perdido y te has preguntado sobre cómo puedes incorporar este enfoque a tu propia vida? En Consumidor Global te damos unos tips básicos para aceptar y disfrutar de tu edad como lo que es, una oportunidad.

Reinventa tu vida: cinco maneras de brillar compartiendo con los demás

1. Sé un mentor inspirador: Tienes un mundo de conocimientos y experiencias que pueden ser el trampolín para quienes están dando sus primeros pasos en tu área. Convertirte en mentor no solo te permitirá guiar a otros, sino que te hará sentir realizada al ver cómo tus aprendizajes cobran vida en sus logros.

2. Pon tu corazón en el voluntariado: Encuentra una causa que resuene con tus valores y entrega tu tiempo y habilidades. Ya sea en tu barrio o a través de una organización, tu esfuerzo puede transformar vidas. ¡Es increíble lo bien que se siente ayudar mientras haces del mundo un lugar mejor!

3. Deja tu huella creativa: ¿Te gusta escribir, pintar o incluso diseñar proyectos? Este es el momento perfecto para dar rienda suelta a tu creatividad y crear algo que trascienda. Usa tus talentos para plasmar tus historias, tus sueños y los valores que deseas compartir con las generaciones futuras.

4. Construye conexiones significativas: La magia de la vida está en las relaciones que cultivamos. Dedica tiempo de calidad a fortalecer tus lazos con quienes amas: tu familia, tus amistades o tu comunidad. Estas conexiones son el verdadero motor de la felicidad.

5. Comparte tu sabiduría con las nuevas generaciones: Tus hijos, nietos o incluso los jóvenes de tu entorno pueden beneficiarse enormemente de tus experiencias y lecciones de vida. Narrarles tus historias o simplemente guiarles con consejos puede crear vínculos profundos e inolvidables.