Esperanza de vida y longevidad son términos que cada vez llaman más la atención en las personas y en la ciencia. La esperanza de vida humana máxima es el número medio de años que una persona puede esperar vivir desde su nacimiento. Además, ahora existe otro nuevo concepto, la esperanza de vida saludable o health span.
Según datos de la Organización Mundial de la Salud en 2019, la esperanza de vida mundial aumentó a 73,4 años, mientras que la health span se quedó atrás con 63,7 años. Cerrar la brecha entre la esperanza de vida y la salud es un objetivo que empezó a cambiar la forma de pensar la longevidad.
El lento avance en los fármacos contra el envejecimiento
La investigadora de Princeton Coleen Murphy ha publicado recientemente el libro Cómo envejecemos: la ciencia de la longevidad, donde describe los últimos avances en la materia y cómo estos pueden derivar en nuevas terapias y tratamientos para enfermedades relacionadas con la edad.
En una entrevista para El País la científica habla de un fármaco para combatir el envejecimiento. Y es que, aunque la agencia que regula la aprobación de medicamentos en Estados Unidos no considera el envejecimiento una enfermedad, ha existido un avance. aunque lento, en el desarrollo de medicamentos contra esa condición.
Un medicamento para la diabetes
Es el caso de la metformina, un fármaco empleado para la diabetes. En concreto, este medicamento ayuda a controlar el nivel de azúcar en la sangre ayudando al cuerpo a responder mejor a la insulina que produce de manera natural, y reduciendo la cantidad de azúcar que el hígado produce y la que los intestinos absorben de los alimentos.
La metformina es una de esas cosas que podrían ralentizar el envejecimiento y deberías poder hacer un ensayo clínico que muestre si la metformina ralentiza, al menos, los biomarcadores del envejecimiento”, aseguró a El País la científica.
Qué es la metformina
Se trata del medicamento más recetado en el mundo para tratar la diabetes tipo 2. También puede ser clave para retardar el envejecimiento, mitigar las enfermedades relacionadas con la edad, prolongar la vida útil y favorecer la salud. Como expresó la investigadora, es segura y se ha demostrado que influye positivamente en los cambios biológicos relacionados con la edad.
No está exactamente claro cómo la metformina actúa, pero los investigadores creen que lo hace sobre varias características diferentes del envejecimiento: cambios a nivel celular, cromosómico y molecular que se acumulan con el tiempo. Estas transformaciones son las que pueden provocar la aparición de enfermedades cardíacas, diabetes, algunos cánceres o demencia, conocidas frecuentemente como “enfermedades del envejecimiento“.
Un medicamento antiguo
Existen estudios que muestran que la metformina se dirige a estos cambios celulares relacionados con la edad. El resultado es que no solo ayuda a controlar la diabetes tipo 2, sino que con el tiempo, las personas con esta enfermedad que tomaban el medicamento tenían tasas de mortalidad más bajas, mejor salud y vidas más largas.
Además, la metformina existe desde hace 60 años y, en general, es segura para la mayoría de las personas, según Steven Austad, profesor distinguido y presidente de Investigación sobre el envejecimiento saludable en la Universidad de Alabama en Birmingham y director científico principal de la Federación Estadounidense para la Investigación del Envejecimiento.