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La Aesan alerta: aléjate de este complemento alimenticio, porque contiene sustancias peligrosas

Estos componentes no declarados en la etiqueta pueden tener efectos farmacológicos e implicar riesgos para la salud

Juan Manuel Del Olmo

Un complemento alimenticio similar al retirado por la Aesan / FREEPIK - 8photo

Los complementos alimenticios no deben utilizarse como sustituto de una dieta equilibrada, y no todos lo que se ponen en el mercado son seguros. Ahora, la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan) ha alertado de que el Thermo Shock, un complemento comercializado en un pequeño bote, no debe consumirse porque contiene sustancias peligrosas que pueden producir reacciones adversas de diversa gravedad.

El complemento contiene yohimbina, que es una sustancia prohibida para su uso en alimentación. Además, contiene estas otras sustancias no autorizadas para su uso en complementos alimenticios: sulbutiamina, 1-3 DMAA, higenamina, cafeoildopamina, N-coumaroildopamina, 3,5'diiodo-L-tironina, halostachina, alfa-GPC, higenamina, N-metiltiramina.

Efectos de estas sustancias

Estas sustancias activas no declaradas en la etiqueta pueden tener efectos farmacológicos y suponer riesgos para la salud de las personas que los consumen. Por ello, la Aesan ha recomendado a las personas que tengan en su domicilio este producto que no lo consuman.

Thermoshock, el complemento alimenticio retirado / AESAN

En concreto, el nombre comercial de la marca es Thermo Shock SCI Labs Nutrition. Viene en un envase de 60 cápsulas cuyo número de lote es 20151024178. La fecha de caducidad es 31/12/2026.

Dónde se ha distribuido

Según la información disponible, la distribución inicial ha sido a las comunidades autónomas de Andalucía, Extremadura, Comunidad Valenciana, Galicia, Castilla - La Mancha, Islas Canarias y Comunidad de Madrid, si bien no es descartable que puedan existir redistribuciones a otras comunidades autónomas.

Esta información ha sido trasladada a las autoridades competentes de las comunidades autónomas a través del Sistema Coordinado de Intercambio Rápido de Información (SCIR), con el objeto de que se verifique la retirada de los productos afectados de los canales de comercialización.