Soy entrenador personal y este es el riesgo de comer productos 'sin azúcares añadidos'

No será la primera ni la última vez que te has levantado con el firme propósito de ponerte a dieta. ‘Esta vez sí que sí’ te has dicho a tí mismo mientras te desperezas. Como si lo viera, ya te has comprado la ropa de deporte para motivarte y ya has tirado hasta el último azucarero de tu casa. Con la mejor de las intenciones te dispones a hacer la compra más sana, recurriendo a los 0% azúcares añadidos de cada pasillo del supermercado. ¿Pero es tan sano alimentarse a base de estos productos como nos han contado? ¿Estamos recurriendo a la mejor opción o solo nos lo han contado en la publicidad?

Ante estas dudas crecientes, en Consumidor Global hemos decidido preguntar al experto David Griñán Cardona, entrenador personal, fisioterapeuta y CEO de la clínica PhysioFitness sobre esta problemática cada vez más extendida de recurrir a los productos de dieta, pues no es oro todo lo que reluce.

El  riesgo de comer productos 'sin azúcares añadidos'

“Cada vez es más común ver en los supermercados productos con la etiqueta ‘sin azúcares añadidos’, lo que puede parecer una opción saludable para quienes buscan cuidar su alimentación. Sin embargo, detrás de esa promesa de reducir el azúcar, a menudo se ocultan ingredientes que pueden ser igual o más perjudiciales para tu salud. Como entrenador personal y fisioterapeuta, quiero compartir la realidad detrás de estos productos y por qué es importante no dejarnos llevar solo por las etiquetas”, nos alerta sobre un asunto cuanto menos desconocido para el consumidor.

¿Qué significa realmente la etiqueta ‘0% Sin Azúcares Añadidos’?

Lo primero que hay que aclarar es qué significa que un producto sea ‘sin azúcares añadidos’. Esto solo indica que no se ha añadido azúcar refinado o edulcorantes calóricos durante su procesamiento, pero no implica que el producto sea bajo en azúcares o más saludable. “Algunos productos pueden contener azúcares naturales provenientes de frutas o ingredientes como la lactosa (en los productos lácteos por ejemplo), que contribuyen al contenido total de azúcar.

Lo más preocupante es que, para compensar la falta de dulzor en nuestras papilas gustativas, muchas empresas utilizan aditivos y edulcorantes artificiales que pueden tener efectos negativos en tu salud”, comenta David Griñán sobre la presencia de los aditivos en todo este imaginario que envuelve al ecosistema de la alimentación dietética.

Riesgos de los aditivos y edulcorantes artificiales

Los aditivos y edulcorantes artificiales están presentes en muchos productos ‘0% Azúcares añadidos’. Y es que, aunque su uso es legal y están aprobados por las autoridades sanitarias, su consumo a largo plazo plantea riesgos que a menudo pasan desapercibidos.

El terrible impacto en tu metabolismo

“Uno de los mayores problemas con los productos ‘sin azúcares añadidos’ es que pueden alterar tu sensibilidad a la insulina. Al consumir edulcorantes artificiales, tu cuerpo recibe una señal de dulzor, pero sin el correspondiente incremento de glucosa en la sangre, lo que puede confundir a tu metabolismo. Con el tiempo, esta discordancia puede afectar la manera en que tu cuerpo maneja el azúcar real, aumentando el riesgo de resistencia a la insulina y, eventualmente, ocasionando la diabetes tipo 2”, explica el experto sobre las consecuencias que los aditivos y edulcorantes de mesa pueden ocasionar en tu cuerpo a largo plazo.

Alteraciones en tu microbiota intestinal

“Algunos de estos aditivos pueden dañar tu microbiota intestinal, que son el conjunto de bacterias beneficiosas que viven en tu sistema digestivo. La sucralosa, por ejemplo, puede reducir la cantidad de bacterias buenas en tu intestino, lo que repercute no solo en la digestión, sino también en el control del peso y en el sistema inmunológico. Un desequilibrio en la microbiota puede contribuir a problemas como inflamación crónica, mala absorción de nutrientes y mayor susceptibilidad a infecciones dado el caso”

La etiqueta 0% azúcares también está en los productos ultraprocesados

Muchos productos ‘sin azúcares añadidos’ entran en la categoría de alimentos ultraprocesados, es decir, aquellos que han sido sometidos a un procesamiento intenso para prolongar su vida útil o mejorar su sabor y textura. “Estos productos suelen estar cargados de aditivos químicos, conservantes, colorantes y aromas artificiales. Los estudios han demostrado que el consumo regular de alimentos ultra procesados se asocia con un mayor riesgo de enfermedades crónicas, como son las enfermedades cardiovasculares, la obesidad e incluso el cáncer. Además, al ser ricos en grasas, sal y aditivos, pueden promover hábitos alimenticios muy poco saludables”, nos advierte Griñán.

Tipos de edulcorantes 'sin azúcares añadidos'

• Aspartamo: Un edulcorante artificial que, aunque es muy bajo en calorías, ha sido objeto de controversia pública por los posibles efectos adversos ligados a la salud neurológica. Algunos estudios sugieren que su consumo puede estar relacionado con dolores de cabeza y trastornos del estado de ánimo en personas más susceptibles a sus efectos
• Sucralosa: Se encuentra en numerosos productos ‘sin azúcar’. Aunque no tiene calorías, estudios recientes indican que su consumo puede afectar negativamente a la microbiota intestinal, lo que influye en la digestión, la absorción de nutrientes e incluso en el estado del sistema inmunológico.
• Acesulfamo K: Este aditivo utilizado en combinación con otros edulcorantes, también ha sido vinculado a problemas de salud gastrointestinal y a sus efectos en la regulación del apetito, lo que puede interferir con los esfuerzos por mantener un peso saludable.

¿Entonces qué compro si estoy a dieta?

David Griñán, entrenador personal y fisioterapeuta, nos ha querido dar una serie de pautas a la hora de hacer la compra cuando queremos cuidar la línea:

“La clave está en la moderación y la lectura atenta de las etiquetas. No todos los productos con la etiqueta ‘sin azúcares añadidos’ son malos, pero es importante que verifiques la lista de ingredientes y nutrientes esenciales de cada alimento. Evita aquellos que contengan una gran cantidad de aditivos artificiales y edulcorantes sintéticos. Apuesta por alimentos lo más naturales y menos procesados posible e intenta apreciar el sabor real del producto” , aconseja a la hora de pensar en la dieta.

Si eres de los más golosos y ves que necesitas ese plus del dulce en tus postres o cafés mañaneros, siempre puedes recurrir a la miel como edulcorante no procesado y natural. Eso sí, siempre y cuando no abuses si lo que estás intentando es reducir el aporte calórico de tus comidas.

Consejos prácticos para llevar una dieta sana

Nuestro entrenador personal, David Griñán, ha querido destacar qué tipo de pautas debemos interiorizar a la hora de mantenernos sanos. Lo primero es cuidarse a través del deporte y lo segundo interiorizar unos pequeños cambios a la hora de hacer la compra a fin de consumir lo más limpio posible, algo que todo nuestro organismo agradecerá.

1. Opta por alimentos enteros: Los alimentos frescos como frutas, verduras, nueces y proteínas magras son siempre la mejor opción.
2. Cuidado con los zumos y batidos comerciales: Muchos productos que aparentan ser saludables pueden contener edulcorantes ocultos.
3. Controla las porciones: Si decides consumir productos ‘0% azúcar’, hazlo con moderación y no lo uses como excusa para excederte en las cantidades.
4. Busca alternativas naturales: Edulcorantes como la stevia o el eritritol pueden ser una opción más segura, aunque también es importante moderar su consumo.

Los productos ‘sin azúcares añadidos’ pueden ser una trampa disfrazada de salud. Aunque a simple vista parecen una alternativa para reducir el consumo de azúcar, el uso de aditivos y edulcorantes artificiales puede acarrear riesgos significativos para tu salud a largo plazo. Como siempre, lo mejor es optar por alimentos frescos y naturales, y ser consciente de lo que estás poniendo en tu cuerpo.