Acertar con un vino que no se ha probado antes siempre es satisfactorio, y más cuando no pertenece a las grandes casas que todo el mundo conoce y su precio es razonable. Ahora, los expertos del medio especializado Wine Searcher han elegido como uno de los mejores dentro de la categoría de los asequibles un tinto de la Denominación de Origen Manchuela. Se trata de Clos Lojen, un caldo que cuenta con 93 puntos Parker.
Este vino, de uva Bobal, es obra de Bodegas Ponce, una empresa familiar fundada en 2005 en Villanueva de la Jara (Cuenca). Para elaborar este vino, la vendimia se lleva a cabo de forma manual, seleccionando cuidadosamente los racimos. Comprobar si seduce o no al paladar es sencillo: en páginas como Decantalo, la botella se puede comprar por solo 7,95 euros.
Un vino económico de “calidad excepcional”
Tal y como recoge Esquire, es un vino al que muchos sumilleres y críticos han echado el ojo por “su calidad excepcional”. Según esta revista, seduce con frescura y espíritu joven, mientras que en boca triunfa por su “frutalidad” y “ligereza encantadora”.
Tal y como reconoce Wine Searcher, la Manchuela está ganando reputación como región productora de vinos de calidad, aunque su progreso esté un tanto obstaculizado por la falta de inversión en desarrollo. Enmarcada entre los valles de los ríos Júcar y Cabriel, y ubicada entre la llanura de La Mancha y la Serranía de Cuenca; este territorio es una de las claves que definen al vino de la D.O. Manchuela.
Características del vino
Los viñedos que pertenecen a la D.O. se encuentran entre 600 y 1100 metros de altura sobre el nivel del mar, con suelos arcillosos con 9'base calcárea y escasas precipitaciones. Las producciones de las bodegas suelen ser moderadas, lo que garantiza que los caldos mantengan su personalidad.
“Unas condiciones climáticas particulares aportan a la uva una evolución extraordinaria. Largas horas de sol, escasez de humedad y una singular fusión continental y mediterránea favorecen el carácter ecológico del vino gracias a nuestro viento solano, que refresca las noches de verano. La peculiaridad de las noches estivales es decisiva, ya que los vientos frescos y húmedos que proceden del Mediterráneo generan un influjo único”, defienden en la web de la D.O.