Kombucha: qué es y para qué sirve

Cuando se trata de cuidar nuestra salud, la alimentación es una pieza clave. Tener una dieta equilibrada y rica en nutrientes es fundamental para que el organismo obtenga todas las vitaminas, minerales y sustancias necesarias para un correcto funcionamiento. 

Cada vez son más los usuarios que apuestan por productos naturales y repletos de beneficios para el cuerpo. En este sentido, la kombucha se presenta como una bebida fermentada que puede ser una buena alternativa a los refrescos azucarados tradicionales. 

¿Qué es la kombucha?

Aunque últimamente está muy de moda, no todos los consumidores tienen claro qué es la kombucha. Pues bien, se trata de una bebida fermentada elaborada a partir de té y una colonia simbiótica de bacterias y levaduras, conocida como scoby. El proceso de fermentación transforma el azúcar en alcohol y ácidos, produciendo una bebida ligeramente efervescente con un sabor agridulce y ácido. 

La kombucha ha ganado mucha popularidad por sus variadas opciones de sabor, ya que se puede infundir con frutas, hierbas y especias durante el proceso de fermentación. Esta bebida probiótica también es apreciada por su bajo contenido en calorías y su capacidad para proporcionar una alternativa refrescante a las bebidas azucarados y procesadas tradicionales. 

¿Para qué sirve la kombucha?

Sirve principalmente como una bebida probiótica. ¿Qué quiere decir esto? Pues que mejora la salud intestinal gracias a su contenido de bacterias y levaduras beneficiosas. De esta forma, mantiene un equilibrio saludable en la microbiota intestinal, lo que puede mejorar la digestión. Además, la kombucha contiene ácidos orgánicos, enzimas y vitaminas que contribuyen a la desintoxicación del cuerpo, eliminando toxinas y apoyando la función hepática.

Esta bebida también es una aliada perfecta para fortalecer el sistema inmunológico debido a sus propiedades antioxidantes y a la presencia de vitaminas del grupo B y vitamina C. Otras personas consumen kombucha por sus efectos energizantes, ya que contiene pequeñas cantidades de cafeína y hierro, que pueden mejorar la circulación y aumentar los niveles de energía. 

Beneficios de la kombucha 

La kombucha es un líquido que aporta multitud de beneficios para el cuerpo. Más allá del bienestar que aporta a la salud intestinal, también destaca por sus propiedades que ayudan a mantener un sistema inmunológico fuerte. 

Yolanda Masa, nutricionista de BluaU de Sanitas, ya destacó los principales beneficios de la kombucha en sus declaraciones a Consumidor Global. La experta pone énfasis en las siguientes propiedades: 

1. Propiedades probióticas: Refuerzan la salud digestiva reduciendo problemas como el estreñimiento o la inflamación.  
2. Refuerzo del sistema inmunológico: Gracias a sus probióticos, la kombucha contiene antioxidantes, vitaminas del grupo B y vitamina C que combaten los radicales libres y  protege las células del daño oxidativo. 
3. Contenido natural de azúcares que se producen durante el proceso de fermentación. 
4. Presencia de enzimas que mejoran la digestión facilitando la descomposición y absorción de nutrientes. 
5. Rica en ácidos orgánicos que contribuyen a la desintoxicación del organismo, eliminando toxinas y apoyando la función hepática.

¿A qué sabe la kombucha?

El sabor de este líquido es peculiar. Combina notas agridulces y ácidas, con una leve efervescencia. El sabor base de la kombucha es ligeramente avinagrado debido a la fermentación pero con una suavidad que lo hace más agradable al paladar.

Eso sí, hay que tener en cuenta que la kombucha puede ser muy variada en cuanto a sabor. A menudo se mezcla con frutas, hierbas, especias y otros ingredientes que aportan toques cítricos, afrutados, florales y herbales. SIn lugar a dudas, ofrece una experiencia de sabor compleja y refrescante, que puede ser tanto ácida como dulce, dependiendo de los ingredientes adicionales utilizados.

¡Cuidado que no te la cuelen!

Consumidor Global ya lo advirtió hace unos meses. No siempre todas las kombuchas cumplen con los requisitos para considerarse como tal. De hecho, a menudo los usuarios se topan con bebidas fake en los lineales de los supermercados que aseguran ser kombucha sin serlo. 

Las claves para identificar una original son sencillas. Nicolás Lavalliere, CEO de LOV Ferments puso el foco en aspectos como la localización. La kombucha siempre debe encontrarse en una nevera para que se conserven los microorganismos vivos. Además, la citada nutricionista subrayó la importancia de observar trozos gelatinosos en la bebida, que evidencian la presencia de levaduras y bacterias vivas. Otras pistas se encuentran en el etiquetado: 

• Debe tener una composición sencilla.
• Huir de las fórmulas que incluyen agua carbonatada.
• La kombucha siempre debe contener algo de azúcar como resultado de la fermentación y, por tanto, hay que huir de las que prometen cero azúcares puesto que habrán usado otros edulcorantes. 
• Los ingredientes claves son: agua, té (negro, verde o ambos), azúcar y scoby, que es el hongo del té.