La industria de la hostelería ha experimentado importantes transformaciones en los últimos años, impulsadas por cambios en las preferencias de los consumidores, avances tecnológicos y la necesidad de adaptarse a un entorno más competitivo y dinámico donde no dejan de surgir negocios en cada esquina de todas las ciudades.
La tecnología ha revolucionado la forma en que los establecimientos operan y se relacionan con los clientes si nos remontamos a como se gestionaban las reservas y los turnos en los restaurantes y bares. Desde sistemas de reservas en línea y aplicaciones de pedidos hasta el uso de software de gestión para controlar inventarios, horarios y finanzas, la digitalización es clave para mejorar la eficiencia y economía de los negocios de alimentación y ocio.
Cobro en caja y menos manejo de efectivo
El modelo tradicional de pagar en la mesa está siendo reemplazado por el cobro en caja, especialmente en locales con alta rotación. Este cambio no solo agiliza la rotación de mesas, sino que también minimiza los riesgos asociados al manejo de dinero por parte del personal. Además, el uso de métodos de pago digitales ha reducido significativamente el empleo de efectivo.
¿Te ha pasado alguna vez que, cansado de esperar a que te traigan la cuenta, decides levantarte y pagar en la caja? Aunque esta solución puede parecer práctica cuando tienes prisa, no siempre es bien recibida en ciertos bares y restaurantes. Por otro lado, en algunos locales, pagar en la caja ya es una norma establecida, lo que puede generar cierta incertidumbre sobre qué hacer.
Un sector en constante cambio tecnológico
Además, las herramientas de automatización, como kioscos de autoservicio o sistemas de pedidos por códigos QR, permiten a los clientes realizar pedidos y pagos sin necesidad de intermediarios, reduciendo tiempos de espera y optimizando la experiencia.
Esta transformación en las costumbres del sector de la hostelería, que en otro tiempo podría habernos parecido inusual, está ganando cada vez más fuerza. El cobro en caja se está consolidando como una práctica habitual, especialmente en locales con gran afluencia de clientes o en aquellos donde predominan las barras y las mesas altas.
“Mi pasión por la hostelería es incalculable, porque al final es un gremio que es muy sociable porque trabajas con mucha gente constantemente y cada día. Gente que viene a celebrar un día especial, que si contribuyes a que todo salga maravilloso, siempre te vas a quedar en la retina de estos clientes”, ha explicado este hostelero y creador de contenido en más de una ocasión sobre la pasión que tiene por el trato al cliente y su negocio. Un negocio que no pocas veces resulta sufrido y bastante estresante, algo que ha obligado a muchos hosteleros a desarrollar distintos trucos a la hora de gestionar el local un día muy ajetreado.
¿Esperar la cuenta en la mesa o ir directamente a la caja?
La creciente adopción de esta modalidad de cobro en caja tiene razones claras. Según explica en TikTok @Jairosanbor, creador de contenido especializado en el mundo de la hostelería, el pago en caja es una estrategia especialmente útil para negocios con poco espacio disponible.
@jairosanbor #parati #vida #hosteleria #negocios #bar #viral #camareros #estrategias #soluciones #protocolos #problemas #restaurantes ##rendimiento #cafe #parodia #cerveza #clientesfelices #empresarios ♬ sonido original - jairosanbor
El objetivo principal del truco de cobrarte en caja es acelerar la rotación de los clientes. Cuando los comensales se levantan para pagar directamente en la caja, liberan la mesa más rápido, lo que permite que un nuevo cliente la ocupe en menos tiempo. Además, se evita que los camareros tengan que desplazarse continuamente para llevar la cuenta, lo que mejora la eficiencia del servicio.
Menos contacto del personal con los pagos
Otro de los motivos por los que se fomenta esta práctica es la reducción del manejo de dinero por parte de los camareros. Centralizar el cobro en un único punto, como la caja, no solo optimiza el flujo de trabajo, sino que también disminuye la responsabilidad individual de los camareros en las transacciones. Al concentrar los cobros en un número reducido de personas responsables de la caja, se minimizan los descuadres y se simplifica la gestión del dinero. Esto permite que los riesgos asociados al manejo de efectivo, como pérdidas accidentales.
Al limitar la interacción con dinero, ya sea en efectivo o mediante pagos electrónicos, se reducen los errores y los posibles problemas derivados de la gestión económica, haciendo el proceso más seguro tanto para los empleados como para el establecimiento. Este cambio también está vinculado al concepto conocido como "quebranto de moneda", un término que se utiliza en el ámbito laboral para describir una compensación económica que algunos trabajadores reciben cuando manejan dinero en efectivo.
Aunque pagar en la caja no es una práctica completamente nueva, su uso está aumentando en bares y restaurantes debido a la búsqueda de mayor agilidad y organización en el servicio. Si en tu próxima visita a un establecimiento te invitan a dirigirte directamente a la caja para pagar, no te sorprendas o creas que se trata de un mal servicio, esta tendencia está dejando de ser una excepción para convertirse en una norma del sector.