Mercadona es un gigante del sector de la alimentación. La cadena de supermercados ha conseguido convertirse en todo un referente gracias a la relación calidad-precio que ofrece en muchos productos.
Cualquier persona que entre en Mercadona lo primero que se encuentra es el pasillo de frutas y verduras. Algo que no es casual. De hecho, se trata de una estrategia con la que la compañía valenciana consigue captar la atención de los consumidores. Te explicamos por qué.
Una estrategia del neuromarketing
Mercadona no solo ha conseguido atraer a su clientela por la variedad y calidad que ofrece de sus productos. La distribución del supermercado también contribuye.
Otras tácticas de Mercadona
La fruta y verdura no es la única sección que está ubicada de forma estratégica en Mercadona. Productos esenciales como la leche o el pan se suelen ubicar al fondo del supermercado. De esta forma, los clientes tienen que recorrer otros lineales hasta llegar a los más básicos. Una estrategia que suele funcionar para aumentar las ventas de otros alimentos o bebidas.
Otra de las tácticas utilizadas por Mercadona tiene que ver con las cajas de pago. Casi todas cuentan con productos como chicles, golosinas o pilas fomentando lo que se conoce en marketing como "compra por impulso".
Una experiencia de compra más agradable
La compañía de Juan Roig también destaca por colocar los productos para niños en las estanterías más bajas llamando la atención de los más pequeños. Lo mismo ocurre con los alimentos que están pensados para adultos, que se suelen encontrar en las estanterías más altas.
Todas estas estrategias de Mercadona no solo ayudan a la cadena valenciana en términos de ventas. La distribución de sus supermercados es fundamental para mejorar la experiencia de compra de los clientes.