Las lluvias de agosto y septiembre auguran una temporada de setas 2024 que podría ser la mejor del último lustro en Cataluña, según los expertos, quienes aseguran que se espera una producción media-alta con el nacimiento de entre 50 y 60 kilos de setas (de todas las variedades) por hectárea.
Y los buscadores de setas catalanes tienen muy clara su predilección en cuanto a sus variedades de hongos favoritas: rovellons, llanegues, fredolics y rossinyols (rebozuelos). Estas son setas habituales en los bosques de la comunidad autónoma, por eso sorprende que Ametller Origen haya decidido importarlas de Bulgaria, una decisión que denota, por enésima vez, la poca importancia que otorga la cadena de supermercados catalana al producto de proximidad.
Ametller Origen vende 'rossinyols' de Bulgaria
"Rossinyol. 29,90 euros el kilo. Origen: Bulgaria. Categoría: --", es lo que encontrarán los clientes que acudan a los establecimientos de Ametller Origen en plena temporada boletaire.
Una oferta cara y poco sostenible que contrasta con la de otros supermercados que sí apuestan por el producto de proximidad.
Las alternativas sostenibles de Bonpreu y Linverd
Por suerte, los consumidores pueden optar por alternativas sostenibles de proximidad como las que ofrecen Bonpreu y Linverd.
La bandeja de rossinyols (26,45 euros/kilo) que comercializa Bonpreu es más económica que la de Ametller y de origen español. Por su parte, Linverd ofrece una bandeja de rossinyols nacionales de 100 gramos por 4 euros.
Las setas falsas de Ametller
Cabe recordar que Ametller recibió un aluvión de críticas en diciembre de 2023, cuando un famoso cocinero denunció que la cadena estaba vendiendo como boletus edulis fresco lo que en realidad era seta de cardo (Pleurotus Eryngii de cultivo) a precio de oro: 49,90 euros el kilo.
Después de la setas falsas, Ametller se vuelve a cubrir de gloria vendiendo rossinyols búlgaros en plena temporada de setas en Cataluña.