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Adiós a Nutriscore: Danone quita el semáforo por dar una “visión errónea de la calidad nutricional”
El nuevo algoritmo del sistema europeo de etiquetado voluntario sobre cómo de saludables son los alimentos, estrenado a principio de este año, tampoco convence a productores ni a consumidores por generar resultados incongruentes
Nutriscore, el sistema europeo de etiquetado voluntario sobre la calidad nutricional de los alimentos, ha sufrido un serio revés. Danone, una de las multinacionales más importantes del sector a nivel mundial, ha anunciado que abandona este método de clasificación.
El grupo de origen español considera que la reciente revisión del algoritmo que clasifica los alimentos con el famoso semáforo de la A (verde) a la D (rojo) “ofrece una visión errónea de la calidad nutricional y funcional de los productos lácteos y vegetales bebibles” que “choca con las directrices dietéticas europeas basadas en los alimentos”.
Contradicciones e incongruencias en la clasificación
La salida de Danone de Nutriscore es un duro golpe para un sistema de clasificación que ha recibido fuertes críticas desde su lanzamiento (Francia lo incorporó en 2017 y se fue extendiendo por otros países europeos en los años siguientes, generalizándose su uso en España en 2021).
Desde su implantación no han cesado las acusaciones hacia esta clasificación nutricional por considerar que no era demasiado fiable y que inducía a error a los consumidores. Los detractores señalaban contradicciones e incongruencias como el hecho de que hubiese bebidas azucaradas con una mejor valoración nutricional que el aceite de oliva. Esas críticas llevaron a una revisión del algoritmo, que entró en vigor el 1 de enero de 2024. Sin embargo, esta actualización tampoco ha servido para contentar a todos los productores ni a muchos consumidores.
Abandono gradual desde septiembre
En este sentido, Danone, que empezó a implementar Nutriscore en todos sus productos de forma progresiva desde septiembre de 2019, es uno de los grupos más críticos con la metodología utilizada, y ha decidido dar marcha atrás y abandonar el famoso semáforo.
A pesar de ser pioneros en la aplicación de la etiqueta, Danone ha expresado su “desacuerdo con la revisión del algoritmo que clasifica los lácteos bebibles y las alternativas vegetales en la categoría de bebidas”. “Esta nueva forma de clasificar lleva a confusión a los consumidores al plantear diferentes puntuaciones Nutriscore para productos que tienen propósitos nutricionales similares y que sólo divergen por su formato”, añaden. Así, Danone irá eliminando “gradualmente” la puntuación Nutriscore de todos los productos lácteos y vegetales bebibles. Además, Danone reclama a la UE “un sistema armonizado de información nutricional interpretativa que beneficie a todos los consumidores europeos” y se muestran “abiertos a seguir dialogando y colaborando para que así sea”.
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